La muerte por suicidio ha sido siempre un tema tabú, pero la Asociación Andaluza de Supervivientes por Suicidio Ubuntu quiere que deje de ser así. Por ese motivo han organizado una jornada de presentación mañana, coincidiendo con el Día Internacional del Superviviente de Suicidio, en la Sala Lequerica de la Bomba de la Universidad de Cádiz desde las 10.00 a las 14.00 horas.
Su presidenta, María Jesús de León, cuenta que la asociación ha nacido gracias a Papageno y que el nombre es muy especial ya que Ubuntu es una palabra ancestral africana que significa yo soy porque juntos somos. Ese es nuestro lema”.
Ella reconoce que “el duelo por suicidio es muy duro. Todos los duelos son difíciles, pero este lleva unas connotaciones que lo hacen más complejo, como es la culpabilidad”. Y añade que, “Las personas que sufren este tipo de pérdidas se quedan atascadas en el dolor por la culpabilidad. Por mucho que hayas hecho siempre te queda la pena de no haber podido hacer más”. Y en eso trabaja esta asociación, en ofrecer ayuda a los familiares.
Hay mucha desinformación y la presidenta explica que “parece una muerte voluntaria, pero no lo es. La mayoría lo hace porque no ve otra salida. Ellos no desean dejar de vivir, sino de sufrir. A veces piensan que es lo mejor para su familia”.
Además, deja claro que “la gran mayoría de las personas que mueren así no son enfermos mentales. Pueden estar atravesando un episodio de depresión por una situación puntual”. Y afirma que “puede pasarle a cualquiera”.
Por último, María Jesús tiene claro que la única solución para bajar las muertes por suicidio es la prevención. “Es donde se está fallando. Hay pocos especialistas y tampoco tenemos un plan de prevención del suicidio en Andalucía”. Y añade, “cada muerte por suicidio es un fracaso de la sociedad”.