El encuentro que estaban disputando el Rayo Sanluqueño y el San Bernardo en La Quinta de la Paz finalizó con un tremendo susto. Todo sucedió en el último segundo. El partido acabó con el resultado de 3-1. Un balón colgado al área del equipo sanroqueño terminó con un tremendo impacto entre el jugador rayista Raúl Fernández, que es natural de Chipiona, y el portero visitante, Iván.
Esa acción significó el 3-1. Ni el futbolista local ni el portero del San Bernardo recuerdan que el balón besó las redes. Ambos quedaron tendidos en el suelo. El guardameta visitante con convulsiones y sin conocimiento. Saltaron los componentes de los dos banquillos, el árbitro decretó el final del partido tras el visto bueno de los dos equipos. No había ganas de seguir jugando porque ya con el tiempo cumplido y con el partido ya prácticamente finalizado lo que preocupaba era comprobar como se encontraba Iván.
El 061 tardó poco tiempo en acceder a estas históricas instalaciones deportivas de Sanlúcar de Barrameda. Momentos angustiosos por la incertidumbre. Este medio desplazaba al presidente del San Bernardo, Adrián Aranda, hasta el Hospital Virgen del Camino. Durante el trayecto una llamada de la novia del portero, llorando. Desconocía lo que había sucedido realmente. La ambulancia hizo acto de presencia a escasos metros tras acceder el presidente de este modesto club al centro hospitalario. Poco después, Raúl Fernández entraba por su propio pie al hospital. La familia de Iván se desplazaba desde tierras campogibraltareñas a Sanlúcar.
