"El debate sobre un posible gobierno económico europeo que usted ha iniciado es positivo. Aunque por el momento haya diferencias, no hay que tener miedo a hablar de política con mayúscula", le dijo a Zapatero el líder del Partido Popular Europeo (PPE), Joseph Daul.
El portavoz liberal, el ex primer ministro belga Guy Verhofstadt, fue más allá y defendió explícitamente al presidente del Gobierno español de las críticas del Eejcutivo alemán a sus ideas de dar más poder a la Comisión Europea (CE) en la aplicación de la estrategia económica europea de cara a los próximos años.
"Necesitamos estímulos, necesitamos, si es necesario, también sanciones y no vernos desalentados (...) por el ministro alemán de Economía", dijo Verhofstadt a Zapatero.
"Le aliento en ese camino y le puedo decir que todo este Parlamento está con usted", señaló el político belga.
El Gobierno socialista español recibió también el respaldo de su familia política en el PE por boca del líder socialdemócrata, el alemán Martin Schulz, que aseguró que las ideas de Zapatero suponen un "soplo de aire fresco para Europa".
Mientras, el centroderecha se encargó de recordar a Zapatero la situación de la economía y del paro en España y le pidió que antes de proponer novedades en la Unión Europea (UE) se dedique a "arreglar su propia casa", dijo el conservador británico Timothy Kirkhope en nombre del grupo euroescéptico que lideran los tories.
Éstos aseguraron tener "reservas" sobre los planes españoles y criticaron que la "sugerencia de que la Unión Europea, en vez de sólo coordinar la política económica, pudiera imponer sanciones" a los países que no cumplan es algo que "huele a control centralista de la economía como en el bloque comunista".
El PPE, aunque defendió las prioridades fijadas por España, expresó sus dudas sobre las "soluciones" que defiende el Gobierno para salir de la crisis, según dijo Daul.
El líder del grupo conservador -el mayor de la cámara- también recordó que "con un desempleo récord de casi el 20 por ciento y un déficit público cercano al 11 por ciento, España, debe decirse, es uno de los países en peor situación de Europa".
Por su parte, Los Verdes insistieron en que el gran pacto social que impulsará España en la UE debe incluir también a las organizaciones de defensa del medio ambiente, para garantizar así un crecimiento sostenible.
Mientras, la Izquierda Unitaria Europea dejó claro que no comparte el programa económico de la Presidencia española porque "no presenta un cambio de modelo económico, un modelo basado en la intervención pública de la economía y regule el mercado", señaló el español Willy Meyer.
Apoyo de los compatriotas
Los eurodiputados Jaime Mayor Oreja y Luis De Grandes, que encabezaron la lista del Partido Popular en las últimas elecciones al Parlamento Europeo (PE), han mostrado hoy públicamente el respaldo de su partido al programa de la presidencia española de la UE.
Mayor Oreja y De Grandes han tomado la palabra en el pleno del PE después de que el jefe del Ejecutivo español y presidente de turno de la UE, José Luis Rodríguez Zapatero, presentara el programa ante los eurodiputados.
Zapatero ha agradecido su apoyo, confirmado en el Congreso español, y ha asegurado que es un factor "extraordinariamente positivo" para su tarea, que pone de manifiesto la voluntad europeísta de España.
Mayor Oreja ha resaltado el respaldo de los populares en un momento que ha calificado de "trascendental" y ha instado a Zapatero a aplicarlo "en la buena dirección".
"El termómetro no va a ser el número de encuentros que celebremos, las buenas palabras, ni los lugares comunes, el termómetro van a ser los resultados", le ha advertido.
En la misma línea ha hablado De Grandes, quien ha calificado el programa de "ambicioso" y ha considerado que apoyarlo es "una cuestión de Estado".
En este contexto ha pedido a Zapatero que lo llene de contenido y no defraude las expectativas creadas.
Ante las dudas que han mostrado algunos eurodiputados por la alta tasa de paro española, De Grandes ha asegurado que el 20 por ciento de paro no incapacita a España, sino que le obliga a buscar una solución "entre todos" para un problema que también es común.
De Grandes se ha mostrado convencido de la capacidad de España "como nación" para afrontar los retos que tiene por delante.