Gianluca Simeone fue uno de los grandes protagonistas del partido del Xerez DFC de este pasado fin de semana. Tras la victoria, el delantero argentino comentaba que “estamos muy contentos, sabíamos que teníamos que venir a ganar. Nunca habíamos ganado dos veces y esto era muy importante. Terminar el año ganando hace que estemos muy contentos y esperemos que siga así”.
El equipo es el segundo mejor visitante, pero el peor local. En este sentido apuntaba que jugar fuera de casa “es muy difícil y más en esta categoría. Esperemos ahora pasarlo a Chapín y hacerlo de la mejor manera con nuestra gente”.
Su gol frente al Utrera llega de “un balón de Ricky al espacio. Yo le había dicho en el vestuario que me la tirase. Me la llevé, me quedé ante el portero y pude definir y ayudar al equipo, que es lo más importante. Estamos todos muy contentos”.
“Nosotros todos los partidos damos todo”, decía. “Estuvimos corriendo muchísimo y me gustaría ver cuántos kilómetros hicimos”. Tras el partido contra el Sevilla Atlético se hizo viral una foto del propio futbolista emocionado tras la victoria. “El otro día tenía mucha emoción por el partido que disputamos, en lo personal venía atravesando un momento complicado, pero ahora estamos saliendo de ese lugar tanto en lo deportivo como en lo personal”.
Su gol se lo dedicó a José Granados, que es “el corazón del vestuario, siempre tira para adelante y siempre hace que pensemos en el fin de semana”.