Según los datos recogidos por el Instituto Nacional de Estadística (INE), la inmensa mayoría de los menores condenados son varones -85 por ciento- y de nacionalidad española -83,1 por ciento- mientras que en el colectivo extranjeros, los de origen africano constituyen mayoría.
Según la distribución de edad, el 33,2 por ciento que han cometido alguna infracción penal tiene 16 años y el 28,2 por ciento tiene 15 años.
Tres de cada diez menores han sido condenados por más de una infracción penal, entre las que destacan los robos -27,8 por ciento-, las lesiones -7,4- y el hurto y uso de vehículo, que representa el 5,8 por ciento del total. Del total de 22.366 infracciones penales cometidas por menores, el 68 por ciento fueron consideradas delitos y el 30 por ciento faltas.
Entre las faltas, las más frecuentes fueron las realizadas contra las personas -63,5 por ciento- y contra el patrimonio -32,6 por ciento-.
De las 18.948 medidas adoptadas por los jueces durante el año pasado, las más frecuentes han sido las de trabajos en beneficio de la comunidad -30 por ciento- y libertad vigilada -29 por ciento-.
Por comunidades autónomas, la que registró un mayor número de condenados menores de edad fue Andalucía (3.608), seguida de Cataluña (1.489) y la Comunidad Valenciana (1.458), mientras que la comunidad andaluza también fue la que tuvo más infracciones penales (5.815)
Aumentan hasta un 30% del total
El 30,9 por ciento de las 172.518 condenas dictadas en 2007 fueron por delitos contra la seguridad del tráfico, seguido de las lesiones -17,6 por ciento-, los robos -11,7 por ciento- y los atentados contra la autoridad, que representan un 6,1 por ciento del total. Según el INE, el 70,8 por ciento de las personas condenadas son de nacionalidad española, mientras que entre el colectivo extranjero, los de origen iberoamericano son la mayoría.
El 91 por ciento de las personas condenadas son hombres, con una media de edad de 34,5 años para los varones y 33,6 años para las mujeres. Destaca la franja de edad de 26 a 30 años, en la que se acumula el 18 por ciento de los condenados.