Reula recordó que “llevan desde septiembre en la puerta de Acerinox y sigue sin darse una solución. Ya es hora de que alguien asuma los compromisos”.
Así, la Intercontrata ha requerido una reunión con la AGI para tratar de solventar la problemática de unos ex trabajadores que “lo están pasando mal. Incluso a uno de ellos lo van a desahuciar de la casa. Mientras, todo el mundo ofrece buenas palabras sin solución”.
En el encuentro con la AGI Reula espera poder tratar también la cuestión de los dos despedidos en MASA e Imtech que asegura la justicia ha calificado de improcedentes pero que las empresas no han readmitido.
El presidente de la Intercontrata vaticinó movilizaciones, si bien aseguró que “el acuerdo para rebajar la conflictividad, acabó con la unión de acción la clase trabajadora de las contratas. Antes estaban unidas y nos movilizábamos en la puerta de la factoría. Ahora vamos al juez y no se resuelve nada”.