El concejal no adscrito de la actual Corporación ha explicado que “no es solo una oficina para facilitar los trámites administrativos a los ciudadanos extranjeros, sino que tiene que servir para integrar a toda esta comunidad, creando programas y organizando actividades que ayuden a salvar esa barrera idiomática”.
Uno de los asuntos más solicitados fue la cuestión urbanística y la regularización de viviendas. Butrón señaló que “algunos aprovechados engañaron a muchos británicos a la hora de adquirir sus viviendas. Es momento de pedirles perdón en nombre de toda la ciudad y sentar las bases para aplicar soluciones justas para todos. Seguimos creyendo que el nuevo Plan General tiene que servir para solucionar problemas, bajando el tamaño de la parcela mínima, incluyendo nuevas zonas como urbanizables que son actualmente zonas blancas y que ya no tienen sentido, y exigiendo a las administraciones que asuma su parte de culpa en todo este desastre aportando la mitad del coste de la regularización”.