La Consejería de Medio Ambiente de la Junta de Andalucía ha desplegado un amplio dispositivo para analizar las causas que pudieron provocar, en la jornada del lunes, la muerte de unos 650 kilos de peces en el cauce del río Iro.
De esta forma, las muestras recogidas el lunes y analizadas in situ han concluido que el PH, la temperatura, el oxígeno disuelto y la conectividad registran parámetros “normales”. Igualmente, se ha descartado la posibilidad de que se estuviesen desviando al río aguas sin depurar procedentes de las tres estaciones de bombeo.
Ante ello se han tomado muestras de agua, que están siendo analizadas en un laboratorio químico de Palmones y se han enviado ejemplares de peces al Centro de Análisis y Diagnósticos que Medio Ambiente tiene instalado en Granada. Sin embargo, estos análisis no podrán decretar unos resultados fiables, al menos, hasta la próxima semana.
Tras lo sucedido en el río Iro, la delegada provincial de Medio Ambiente, Gema Araujo, ha aclarado que durante los próximos días “se va a realizar un seguimiento diario y exhaustivo en el cauce del río Iro”.
