La plantilla de Urbanos Amarillos, la concesionaria del servicio de transporte público, es consciente de que en los próximos días deberá afrontar una negociación encaminada a reducir en un 20 por ciento la aportación que el Ayuntamiento realiza anualmente a la empresa.
El caso es similar por tanto al de Urbaser, si bien cuenta con la ventaja de que la empresa está actualmente intervenida por el Consistorio, lo que de algún modo va a permitir la negociación directa entre el comité de empresa y el Gobierno local.
La relación entre las partes es bastante fluida desde que el Ayuntamiento decidiera secuestrar la concesión, aunque su devenir inmediato dependerá del planteamiento que se traslade a los trabajadores. “La plantilla ha aceptado recortar el coste del servicio en un 20 por ciento, pero ahora estamos pendientes de ver de dónde se recorta. Nuestra idea es que el salario se toque lo menos posible, aunque somos conscientes de que habrá que hacer algún esfuerzo”, admite el portavoz del comité, Ángel Morales.
El convenio, acordado entre las partes en tiempos de bonanza económica, invita a pensar en la posibilidad de que los trabajadores cedan mejoras sociales con el objetivo de tocar lo menos posible los salarios. “Está claro que todos tenemos que apretarnos el cinturón y seguir viviendo. Nos reuniremos las veces que sea necesario para alcanzar un punto de encuentro entre las partes”, adelanta Morales.
Esas negociaciones no se han iniciado estos últimos meses porque a los trabajadores se les han adeudado hasta siete nóminas. Ahora restan por abonarse dos salarios y medio, que se van a saldar a finales de esta misma semana. Esta transferencia permitirá que la plantilla esté al día después de “cuatro años” de atrasos en el cobro de las nóminas.
Una vez normalizados los pagos arrancarán las conversaciones encaminadas a reducir en un 20 por ciento el coste anual del servicio en la última de las concesionarias municipales.
Una negociación a dos bandas
El hecho de que Urbanos Amarillos esté intervenida por el Consistorio va a permitir que los titulares de la empresa no participen en la negociación, algo que sin duda beneficiará la adopción de un acuerdo que, posteriormente, sí tendrá que asumir la compañía.
Una decena de autobuses están ya listos para circular
La entrada en servicio de los 21 autobuses adquiridos a la Empresa Municipal de Transportes (EMT) de Madrid parece ya inminente. Alrededor de una decena de estos vehículos se encuentran ya preparados para empezar a circular, una vez que se le han colocado las máquinas expendedoras de billetes y las emisoras. También se han culminado ya en varios casos los trabajos de pintura, con el objetivo de dar una sensación de uniformidad a toda la flota. Estos vehículos lucirán el color azul propio de Jerez, aderezado con las olas del escudo en color blanco, en sentido inverso al que puede observarse en los autobuses que empezaron a circular en mayo de 2011. Coincidiendo con la campaña de Navidad se pondrá también en marcha la nueva red de itinerarios.
