La Hermandad del Amor pudo finalmente ayer celebrar el rezo del Viacrucis como tenía previsto: un Viacrucis este muy especial, ya que fue presidido por la Virgen de la Esperanza del Calvario, recuperando una tradición de la que ya había formas precedentes en el siglo XVI que se denomina Viamatris.
Hasta última hora, la Junta de Gobierno de la Hermandad, presidida por su Hermano Mayor Manuel García de Quirós no tomó la decisión definitiva, en vista de las posibilidades de chubascos que anunciaban los partes meteorológicos. La decisión final fue en positivo, y tras la celebración de la misa de las siete de la tarde, la Hermandad sacó a la calle a la Virgen de la Esperanza del Calvario, portada en parihuelas por sus costaleras, aunque posteriormente cualquier vecino que lo solicitó pudo cargar sobre sus hombros a la Virgen.
La alcaldesa de la Villa, María Eva Corrales, quiso acompañar a la Hermandad del Amor en su salida, y participar en el Viamatris, qeu despertó gran intereés popular entre los vecinos de la zona y de la barriada por la cual transcurrió el rezo. La Hermandad del Rocío de Rota, con la cual está hermanada la del Amor, partició también en este acto con la presencia de algunos de sus miembros y de su Hermano Mayor, Juan Manuel Montes Delgado.
La Virgen recorrió zonas del barrio del Molino como la Plaza de la Hispanidad, la Plaza del Chorrillo o el Patio Santa Cruz, acompañada de numerosos fieles que rezaron junto al párroco del Carmen el Viacrucis, y se turnaron para portar a la Esperanza del Calvario. Un acto piadoso previo a la Semana Santa que pretende establecer una nueva tradición con el objetivo de, como mencionó el Hermano Mayor de la Hermandad del Amor, "llevar la fe a la calle en este Año de la Fe".
