Los trabajadores del servicio de ambulancias de Jerez cortaron ayer la antigua Nacional IV, a la altura del Hospital de Jerez, durante una hora hasta en dos ocasiones en la segunda jornada de huelga convocada por este colectivo hasta el 30 de junio cada lunes, miércoles y viernes de la semana para protestar por el incumplimiento de los acuerdos de convenio pactados que finalizaron en diciembre de 2012.
Del medio millar de conductores de ambulancias que van a la huelga y que trabajan para las cuatro empresas concesionarias que se reparten el servicio en la provincia, 150 lo hacen para Digamar, empresa que cubre esta tarea en Jerez y la Costa Noroeste, mientras que SSGA (Servicios SocioSanitarios Generales de Andalucía) atiende la zona de Cádiz; Ambulancias Barbate para La Janda y SSGA-Algeciras se encarga del Campo de Gibraltar.
Hasta el momento, sólo van dos jornadas de huelga, pero desde el sindicato CCOO ya hablan de un seguimiento “masivo” y, en consecuencia, del consiguiente perjuicio para los usuarios, que exceptuando las urgencias y los servicios de oncología, que están garantizadas al 100%, se están viendo obligados a recurrir a taxis o vehículos particulares para ser trasladados al centro hospitalario. Es el caso de los pacientes que acuden a darse de diálisis u otros tratamientos similares.
Tal como señala el presidente del comité de empresa de Digamar, Esteban Flores, el que la empresa haya obviado los acuerdos mencionados está provocando en la práctica que casi no se contraten eventuales, las bajas no se cubran, al igual que las jubilaciones, lo que se está traduciendo en un importante empeoramiento del servicio que al final pagan los pacientes y, por consiguiente, el aumento de los tiempos de espera. En este sentido, denuncia que los traslados para recibir tratamientos en el Hospital se han puesto en casi dos horas. A esta batería de problemas añaden el mal estado de los vehículos, así como los recortes “encubiertos” que aseguran que vienen sufriendo en sus salarios, y que cuantifican en casi el 13%.
Malestar con la Junta
Hasta el momento, en los contactos mantenidos con la Junta, el último en la mañana de ayer con el director económico del Hospital, les han trasladado que el conflicto es con la empresa y que, por tanto, la Administración andaluza no puede mediar. Un posicionamiento contra el que se oponen radicalmente. “Ellos (por la Junta) sí que tienen que mediar porque son el órgano competente que contratan”, denuncian indignados.
