La Comisión Europea propondrá mañana reforzar las operaciones de la Agencia de Control de Fronteras (Frontex) en el Mediterráneo en los próximos meses con el objetivo de prevenir la muerte de inmigrantes en naufragios como el registrado en octubre frente a las costas de la isla italiana de Lampedusa.
La iniciativa de Bruselas responde al encargo realizado por los líderes europeos el pasado octubre en respuesta a la catástrofe de Lampedusa. En esa cumbre, España, Italia, Malta, Grecia, Chipre, Eslovenia y Bulgaria reclamaron una actuación urgente de la UE, pero chocaron con la resistencia de los países nórdicos, por lo que se aplazó hasta diciembre la adopción de medidas.
Tras un par de reuniones con un grupo de expertos de los Estados miembros, el Ejecutivo comunitario tiene previsto poner sobre la mesa un total de 38 medidas concretas, según han informado fuentes europeas.
Las iniciativas se articularán en 5 ejes: el refuerzo de la vigilancia de las fronteras, la solidaridad con los países que se enfrentan a una fuerte presión migratoria, la lucha contra el tráfico de seres humanos, el refuerzo de la protección en origen de los inmigrantes y demandantes de asilo y las relaciones con los países de origen y de tránsito de la inmigración.
El refuerzo de las operaciones de Frontex en el Mediterráneo equivaldría a una versión reducida de la gran operación de seguridad y salvamento desde Chipre a Gibraltar que propuso en octubre la comisaria de Interior, Cecilia Malmström. Se lanzaría a principios de la primavera de 2014 y probablemente obligaría a aumentar el presupuesto de la Agencia, según las fuentes.
Entre las medidas que tiene previsto proponer el Ejecutivo comunitario para aumentar la solidaridad con los Estados miembros que sufren mayor presión migratoria se encuentra una línea de crédito de 30 millones de euros y un apoyo reforzado de la Oficina Europea de Asilo.
Bruselas también reclama reforzar el papel de Europol en la lucha contra el tráfico de seres humanos y mejorar el intercambio de información entre los Estados miembros.
Por lo que se refiere a las relaciones con países terceros, el grupo de trabajo ha propuesto organizar puntos de acceso para que los inmigrantes puedan solicitar la entrada en la UE desde países terceros.
También se propone reforzar la misión EUBAM Libia, cuyo objetivo es ayudar a las autoridades del país a mejorar y desarrollar la seguridad de sus fronteras, pese a que los europeos admiten que tienen "problemas de interlocución" con el Gobierno libio.