Es imposible hacerlo peor. Basta de la desidia de algunos jugadores en el campo, de la falta de compromiso, de actitud, de superarse partido a partido a peor, de no tener un patrón de juego, de que cada choque sea una vil improvisación,... El Recreativo vive en una falta de respeto continua al aficionado y al fútbol. ¿Quién puede creer en un equipo que hasta su entrenador diga que no ha competido? ¿Cómo no va a competir un club que está peleando por ascender a Primera división? Normal que se pite. Y encima soportar como los jugadores llevan fundidos físicamente más de dos meses. Estamos en mayo y el Jaén, que sólo ha jugado dos partidos menos en Copa del Rey que los recreativistas este año, demostró que aún se puede correr y luchar. Sólo se le puede permitir al Barça, Atlético de Madrid, Real Madrid,... que estén fritos porque ellos han disputado casi 60 partidos. ¿Pero el Recre? Los albiazules juegan un partido a la semana y parecen estar en las últimas. De esta problemática hay responsable y tiene nombre y apellidos, ya sea culpa del míster o del preparador físico.
El Recreativo acumula una catastrófica racha en la que ha sumado siete puntos de 33 posibles. En esos once partidos tan sólo ha ganado uno y el colchón de puntos que consiguió en las primeras jornadas ya no sirve.
El conjunto onubense, que no sabe a qué juega, ha inventado una forma de fútbol. Una especie de mezcla entre el ‘tiki-taka’ y el patadón. El equipo sale con el balón jugado desde atrás pero es llegar al centro del campo y enviar un melón sin sentido a la nada. Un estilo bastante complicado para jugar por los delanteros.
Para colmo desde el club se vende optimismo cuando da pena ver la oportunidad tan jugosa de ascender como la que se ha tenido al alcance de la mano este año. Para bien o para mal el Recre permaneció ocho meses entre los primeros e incluso bastante tiempo el primero.
Ese optimismo que se vende, como el de los presupuestos, en el que el Decano lucha con una economía blandengue por estar con los grandes, cuando el Jaén con menor presupuesto con diferencia bañó a los albiazules con poquito que hizo.
En fin no todo es una porquería. Al fin y al cabo el Recreativo se encuentra a un punto de los puestos de ‘play-offs’ a pesar del haraquiri en tierras jiennenses. Además, Morcillo tira del carro aunque no pueda él solo con todo. Es el máximo goleador del equipo en la segunda vuelta y en Jaén metió el gol más bonito seguramente de su vida.
