Los colectivos sociales contrarios a la ampliación del servicio de estacionamiento en superficie regulado por precio o zona azul, que en Sevilla ha pasado de 4.112 a 7.553 plazas, han celebrado este miércoles un encuentro en el Ayuntamiento hispalense con el director del área de Movilidad, y los portavoces municipales del PSOE e IU-CA, reclamando la derogación de la ampliación del número de plazas y "empezar de cero".
El pasado 18 de junio, como se recordará, entró en vigor la ampliación del servicio público de estacionamiento en superficie regulado por precio o zona azul, que contempla casi 190 calles, avenidas y plazas sometidas a esta figura de pago. A través de esta medida, la sociedad Aparcamientos Urbanos de Sevilla (Aussa), participada en un 51 por ciento por la sociedad municipal Transportes Urbanos de Sevilla (Tussam), pasaba a explotar 7.285 plazas de estacionamiento como zona azul a partir de las 4.112 que hasta entonces estaban sometidas a esta figura.
Todas estas plazas de estacionamiento se reparten entre las zonas Macarena, Centro, Luis Montoto, Viapol, Pirotecnia, Bami y Los Remedios, aunque la zona de mayor conflicto es la de Bami, donde algunas voces avisan de que la facturación de los comercios está bajando un 40 por ciento.
El caso es que tras este encuentro, los portavoces de la plataforma social han explicado que las ordenanzas fiscales de 2015, aprobadas ya por el pleno del Ayuntamiento, implican una "subida impositiva encubierta pero de facto" en lo que se refiere a la zona azul, pues "se modifican sustancialmente las categorías" y la zona azul de muy alta rotación (MAR) experimenta subidas de "hasta el 200 por ciento", mientras la de alta rotación registraría incrementos de hasta el cien por ciento y la de baja rotación una bajada de hasta "el 70 por ciento".
"GRAVES PROBLEMAS"
Todo ello cuando la implantación de la zona azul en nuevos espacios urbanos está ya causando "graves perjuicios económicos" y la plataforma tiene ya contabilizado el "cierre" de unas cuatro o cinco pequeñas y medianas empresas (Pymes), por lo que reclaman "la anulación de la ampliación de la zona azul". "Hay que derogarla y empezar de cero", han insistido explicando que el director de Movilidad les ha "instado" a formular alegaciones a las nuevas ordenanzas fiscales. Para los activistas, de cualquier modo, la ciudadanía sufre "otro nuevo impuesto con fines recaudatorio" sin un "plan de movilidad" que compense las nuevas plazas de zona azul.
El portavoz municipal socialista, Juan Espadas, ha lamentado que ninguno de los concejales del PP haya asistido a la reunión y ha dicho de su lado que la ampliación de la zona azul sólo busca "recaudar y asfixiar" a la ciudadanía, explicando que desde la entrada en vigor de la ampliación de la zona azul y hasta el 30 de septiembre, el nuevo modelo de zona azul ha recaudado ya "un millón de euros" para las arcas municipales, sin haber solucionado los "problemas de movilidad". Avisando de que el Gobierno local incurre en el "enorme error político" de "empecinarse" en mantener la ampliación de la zona azul, Espadas ha prometido derogarla si llega a la Alcaldía.
"INSTRUMENTO DE RECAUDACIÓN"
José Manuel García, por parte de IU-CA, ha censurado el hecho de que ningún concejal del PP "haya tenido la deferencia de sentarse con los colectivos afectados por la imposición de la zona azul", lamentando "los perjuicios que esta medida está ocasionando ya entre vecinos, trabajadores, comerciantes, estudiantes, pequeñas empresas, usuarios del Hospital Virgen del Rocío, etcétera". En su opinión, "ha quedado perfectamente claro que el PP no concibe la zona azul como un elemento de movilidad, sino como un mero instrumento de recaudación". Asimismo, ha lamentado que Zoido continúe "empeñado en no reconocer el problema que ha originado en varios barrios sevillanos", donde cada día crece el rechazo ciudadano a la imposición de esta fórmula de estacionamiento.
Así, ha reclamado de nuevo la derogación "inmediata" de esta medida, por haber sido establecida "sin consenso ni participación ciudadana", y ha defendido la apertura de un debate global sobre movilidad, en cuyo marco se aborde cómo y dónde habilitar este sistema de aparcamiento de pago.
