Arrendatarios de la antigua Sevilla Global, ahora extinguida, se han visto sorprendidos estos días por la recepción de una carta de Hacienda en que les comunica el embargo en su favor de los pagos que tengan pendientes con la antigua empresa municipal. Se da la circunstancia de que el Ayuntamiento acordó a finales de 2013 la liquidación de la sociedad y la asunción de todos sus activos y pasivos.
La Agencia Tributaria está enviando cartas a personas que, según su base de datos, tienen firmado un contrato de arrendamiento con la extinta sociedad municipal Sevilla Global para informarles de que “se declaran embargados los créditos a favor del mismo (Sevilla Global) que tenga pendientes de pago a la fecha en que reciba esta diligencia, ya sean cantidades facturadas, pendientes de facturar o que no requieran facturación, así como aquellos que sean consecuencia de prestaciones aún no realizadas derivadas de cualquier tipo de contrato en vigor con el citado obligado al pago”, según se recoge de la misiva enviada por la Agencia.
El hecho de que sea la Agencia Tributaria, dependiente de la Delegación de Hacienda en Andalucía, la que envíe estas misivas ha causado cierta extrañeza, ya que el 20 de diciembre de 2013 la Junta General de Sevilla Global, empresa ya entonces en liquidación, acordó aprobar el proyecto de cesión global de activos y pasivos suscrito una semana antes por los liquidadores de la citada compañía.
Según aquel acuerdo, el Ayuntamiento hispalense se subrogó íntegramente en la titularidad de los activos y pasivos de Sevilla Global, “incluso en cuanto a cualesquiera procedimiento o reclamaciones y recursos judiciales, administrativos, contencioso administrativos o de cualquier otra índole que se hallen en curso en los que la sociedad sea parte”.