El Grupo Municipal del PSOE quiere aclarar el motivo por el que la Oposición al completo ha abandonado el pleno celebrado hoy en el salón de actos del Ayuntamiento tras un último ruego verbal “impropio e inaceptable en una institución democrática, planteada por el alcalde de Torremolinos. Tanto los concejales del PSOE como los de Izquierda Unida, al comprobar el contenido de la intervención de Fernández Montes, se han levantado y se han salido de la sala de plenos.
Desde el PSOE lamentan que el primer edil, fruto de su nerviosismo de ser desalojado por los ciudadanos de Torremolinos, aproveche el último pleno de esta legislatura antes de las elecciones municipales para “arremeter contra su principal adversario político, José Ortiz, sabiendo de las posibilidades reales que este tiene de sustituirle en el puesto”, afirman.
De ahí que saque a colación un tema que “no tiene reproche judicial, ético ni político, que además ya ha sido tratado en dos plenos y donde el propio José Ortiz puso a disposición del alcalde toda la documentación de su empresa. Sin embargo Pedro Fernández Montes no ha mostrado ningún interés en ver dicha documentación porque no lo interesa saber la verdad sobre el caso sino intoxicar a la población a través de los medios públicos que se mantienen con los impuestos de los vecinos de Torremolinos.
Contrasta esta inquietud indagatoria del alcalde sobre una actividad privada con su actitud en la gestión pública, donde en los últimos cuatros años se ha negado siempre a dar información de los 445.516.270 euros de dinero público que ha gestionado, negándose sistemáticamente a informar a los ciudadanos y a la Oposición de los detalles concretos solicitados tanto en facturas, contratos, gastos concretos o adjudicaciones. Ejemplo de su opacidad es que en el 2013, ante la solicitud por parte del PSOE de quién y bajo qué motivo se gastó 7.000 euros en la feria en comidas, su única respuesta fue que no ofrecía información porque no encontraba la factura.
“Con ello demuestra que el alcalde solo recurre a proclamas electoralistas a la desesperada, por el miedo a perder el sillón y ante el pánico que sufre al pensar que la ciudadanía pueda conocer la verdadera y nefasta gestión que ha llevado a cabo en estos últimos 20 años, con clara falta de transparencia y decidida ocultación y opacidad, impidiendo constantemente a la Oposición el realizar con rigor su labor de fiscalización”, finalizan.