Con este trabajo, que se publica hoy en la revista Analytical Chemistes, los investigadores querían desarrollar un método analítico específico para detectar drogas en el aire y poder disponer de herramientas que permitan evaluar su consumo de forma rápida.
El estudio ha detectado en el aire de estas dos ciudades hasta 17 compuestos pertenecientes a cinco clases de drogas: cocaína, anfetaminas, opiáceos, cannabinoides y ácido lisérgico.
Los investigadores han puntualizado, sin embargo, que los resultados no son representativos del aire de estas ciudades porque las muestras eran sólo de una zona concreta.
Los autores del trabajo han asegurado que estos niveles de drogas en el aire no implican ningún riesgo para la población.