El Ayuntamiento vuelve a mover ficha para evitar que la huelga de limpieza de 21 días en el servicio que vivió la ciudad hace tres años se repita desde el 3 de enero tras la amenaza de la plantilla de Urbaser si no recuperan los recortes salariales y mejoras sociales a los que tuvieron que renunciar al recortarse el presupuesto en el servicio un 20%. ¿Cómo? Impulsando un calendario de negociaciones entre Urbaser y la plantilla, a partir de la reunión que mantuvieron este martes con representantes de la compañía a los pocos días de que la Junta local de Gobierno aprobara instar a empresa y trabajadores a que se sienten a negociar.
Después del encuentro, el delegado de Sostenibilidad, José Antonio Díaz, destacó la “buena predisposición” mostrada por Urbaser en dicho encuentro al comprometerse a convocar a los trabajadores a una Mesa de Negociación cuya primera cita será inicialmente el próximo lunes. “A partir de hoy (por ayer) la empresa nos ha dicho que convocará a los trabajadores para abrir este periodo de negociación”, detalla Díaz, que admitió que el servicio de limpieza es mejorable, una necesidad en la que también coinciden con la concesionaria. “Tanto el Gobierno local como la propia concesionaria reconocemos que las cosas podían haberse hecho mejor anteriormente y somos conscientes de que hay que aplicar mejoras en el servicio”, señaló. Por tal motivo, la apertura del inminente periodo de negociación “es también una oportunidad para mejorar la prestación del servicio en la ciudad, un servicio esencial y básico. Reiteramos nuestra confianza en una solución dialogada”.
Por su parte, en el seno del comité de empresa, que este martes por la noche aún no tenían constancia oficial de la reunión del lunes, aseguran que están a la espera de que Urbaser les cite. “Más predisposición que tienen los trabajadores para sentarse y evitar lo que pueda venir no la tienen ni la empresa ni el Ayuntamiento”, apunta el presidente del comité, Carlos Conesa.
Prueba de ello, como dijo, es que el lunes “a primera hora” los representantes de la plantilla estaban en la puerta de la dirección de la empresa con el comunicado del viernes de la Junta de Gobierno local “para sentarnos a negociar”. En ese momento, como detalla, les emplazaron a que se celebrara la reunión de ayer con el Ayuntamiento, y ahora esperan que sean convocados este lunes. “Tenemos muchas ganas de negociar, pero se tienen que dar las condiciones para que esto ocurra; Lo que queremos es que nos devuelvan lo que nos dijeron que nos iban a devolver después de tres años”, advierte Conesa en referencia al recorte salarial del 10% y las mejoras sociales que sacrificaron en el nuevo convenio para impedir los despidos de 125 compañeros. Unas condiciones que se daban cuando el presupuesto de la limpieza tenía cuatro millones más de euros. ¿Qué pasará si el Gobierno municipal no incrementa dicha partida?”Esa es una cuestión interna entre el Ayuntamiento y la empresa”, sentencia Conesa.
