Dicen que así serán los salones recreativos del futuro. Gafas que nos permitirán sumergirnos en otros mundos y mandos que se convertirán en una extensión más de nuestro cuerpo. Emociones, aventuras y experiencias únicas gracias a los entornos 3D y la realidad virtual. Una tecnología de la que ya se puede disfrutar en Málaga, gracias a VR Arcade, una centro de experimentación avanzado en realidad virtual que próximamente se ubicará en las instalaciones de la incubadora de Promálaga CityLab, en el entorno de calle Nosquera, en pleno centro histórico. Málaga se pone a la vanguardia en innovación convirtiéndose en la primera ciudad española con este espacio pionero que en un futuro no muy lejando se mudará al Polo Digital que abrirá sus puertas en Tabacalera.
Particulares y empresas podrán acceder a esta sala bajo reserva por solo 30 euros para experimentar simulaciones virtuales o jugar a videojuegos, aunque ya se trabaja en sus usos aplicados a campos como la educación, la arquitectura o la sanidad, entre otros sectores. Detrás están dos jóvenes emprendedores malagueños, Elena Blanes y Juan Francisco Campos, de los pocos españoles con certificación como expertos en el desarrollo de videojuegos por la empresa Unity3D, la más avanzada en tecnología en la industria a nivel mundial. “Tenemos todas las novedades que hay en el mercado, como las gafas que Sony lanzó la semana pasada para la PlayStation VR”, explica Blanes, que hace hincapié en “apostar” por ser pioneros con esta tecnología en Málaga.
Oportunidades
Un nuevo campo que se abre para las empresas locales y que permite incluso acabar con fobias como el miedo a los espacios cerrados o volar en avión. “Queremos que la gente conozca la experiencia y que los desarrolladores malagueños vean que puedan posicionarse en este campo”, ahondó Blanes. Para la puesta en marcha del proyecto han contado con el apoyo de la multinacional Learnbrite, líder en tecnología virtual en Estados Unidos. La realidad virtual ya no es cosa del futuro. Ciudades como Nueva York, Los Ángeles, Moscú, Amsterdam o Londres ya trabajan en abrir sus salas virtuales. La que está considerada la próxima revolución tecnológica aterriza en Málaga y está al alcance de todos.
