El Defensor del Pueblo Andaluz ha admitido al trámite la queja presentada por Óscar Aragón Acosta, al entender que cumple con los requisitos para ser tratada por la Institución del Parlamento de Andalucía.
Aragón Acosta, que vive en San Fernando, está casado y tiene una hija de cinco años, quiere instalar un quiosco destinado a la venta de prensa, golosinas y otros productos similares.
Fue a una delegación que se llama de Desarrollo, que dirige el socialista Conrado Rodríguez, donde, para empezar, le dijeron que los quioscos se conceden por el procedimiento de “concurrencia competitiva”. O sea, como los del Parque del Oeste o el del Barrero, que lo sacan a concurso y casi siempre quedan desiertos.
Óscar fue a un abogado que le dijo que el Ayuntamiento no tiene ordenanza alguna que fije esa normativa legal, la de ese tipo de quiscos, por lo que tiene que remitirse a una legislación superior.
Esa Administración superior es la Junta de Andalucía que para casos como el del quiosco en cuestión establece que al no haber normativa, la competencia la tiene la Junta de Gobierno Local, que a su vez puede delegar en el concejal, en este caso, de Desarrollo, Conrado Rodríguez.
Sólo encuentra silencio por parte del Ayuntamiento de San Fernando.
Ese escrito lo lleva al Ayuntamiento donde Óscar se encuentra con lo que se llama silencio administrativo, que en este caso significa que no y el emprendedor-empresario se pone en la puerta del Pleno a reivindicar el puesto de trabajo que se quiere crear él mismo.
Y llegó Patricia
La alcaldesa, Patricia Cavada -estamos ya en enero de 2016- al ver que estaba hablando con la prensa, se acerca y le dice que se arreglará todo. Y tras una nueva reunión se le pide que presente otra vez la documentación.
Y Óscar Aragón presenta de nuevo la documentación, con sus bocetos de varios tipos de quioscos para que sea adecuado al entorno y después de diez o doce reuniones más, le dicen que desde Urbanismo se va a diseñar un tipo de quiosco.
De Conrado Rodríguez pasa a la jurisdicción de la delegada de Urbanismo, Claudia Márquez, quien le dice que en dos semanas habrá fumata blanca para el diseño. Conrado, a las dos semanas, le dice que la cosa se está retrasando y Óscar, que no se rinde, va a hablar con el técnico correspondiente de Urbanismo que le dice que a él nadie le ha encargado nada.
Y es que había un fallo en el sistema. Después de asistir a todos los Plenos -con lo que cansa eso- resulta que desde el Área de Contratación le dicen que eso no corresponde a Urbanismo sino a Patrimonio y cuando llega a Patrimonio “me dicen que me han estado mareando la perdiz”, dice Óscar Aragón.
Después de decirle desde Patrimonio que presente la documentación otra vez, y presentarla, le dicen que “va para largo” -ya tenemos que ir por el mes de abril, por lo menos- y en el mes de junio le dicen “que no se ha movido ni un papel”.
Óscar Aragón sigue en el paro, casado, con una hija de cinco años que pronto cumplirá seis y asistiendo a los Plenos -con lo pesado que es eso- a ver si alguien dice la palabra mágica y hace que funcione la Delegación de Desarrollo Económico, la de Desarrollo Urbanístico, la de Desarrollo Sostenible y la de Políticas de Igualdad. Además de todas las demás.
Óscar Aragón sigue estando en todos los actos en los que se encuentran los responsables municipales, incansable, enseñando su folio a las cámaras. La visita del Defensor del Pueblo Andaluz a San Fernando le proporcionó la oportunidad de presentar la queja ahora admitida.
No sabe cómo se las gastan en San Fernando con el Defensor del Pueblo.
Nota: El video que acompaña a la noticia es de enero de este año. No ha cambiado nada.