El veterano defensa argentino Martín Demichelis confesó hoy en su presentación como jugador malaguista que es "feliz" por recalar de nuevo en el club andaluz porque los dos únicos equipos que le motivaban y le podían "despertar la continuidad y la ambición" eran el River Plate y el Málaga.
Demichelis, de 36 años, dijo a los periodistas que es un "enorme placer volver a estar aquí" y mostró su agradecimiento a la entidad malaguista, en la que militó en una primera etapa desde enero de 2011 hasta junio de 2013, jugó 103 partidos y anotó nueve goles.
El central afirmó que acepta como "una gran responsabilidad" "este grandísimo desafío" de su regreso a 'La Rosaleda" y que, a pesar de su edad y de "no venir con actividad ni ritmo de partidos", su obligación "es hacerlo igual o mejor" y que, en función de su rendimiento, tendrá o silbidos o a la "gente contenta".
"Sé donde vengo, todos seguimos al Málaga", afirmó Demichelis, quien agregó que "hay que ir paso a paso" y "día a día" para evaluarse y que la afición malaguista haga lo propio con su rendimiento en esta su segunda etapa y después de una primera de "dos años y medio superintensos e inolvidables" .
Aunque dijo que "prioriza lo deportivo", el zaguero argentino confesó que encontró en Málaga "un lugar donde en un futuro posiblemente viva", que se debía a sí mismo regresar y que "ojalá pueda ayudar".
Martín Demichelis calificó como "un gran honor" portar el dorsal '3' que ha dejado vacante el defensa brasileño Weligton, a quien calificó como una persona muy "significativa", con la que ya ha hablado y por lo que se siente "un afortunado".
El nuevo jugador malaguista explicó que cuando se fue del Málaga rumbo al Atlético de Madrid, le dolió que los cinco millones de euros de su posterior traspaso al Manchester City del chileno Manuel Pellegrini no hubieran sido para las arcas malaguistas, lo que calificó de la "parte más dolorosa" de esa transacción.
Se refirió también a una deuda que en su día le reclamó al Málaga y aclaró que lo hizo porque tenía que abonar una cantidad impagada a Hacienda, ya que cuando recaló en el club de la Costa del Sol lo hizo ganando "la mitad del contrato que tenía en el Bayern de Múnich".
El jugador, de 36 años, militó este año en el Espanyol y rescindió su contrato después de jugar solamente dos partidos con el club barcelonés, al que llegó procedente del Manchester City del chileno Manuel Pellegrini, quien también lo entrenó en el Málaga.