El Museo de Huelva lleva cerrado desde la pasada semana tras el desplome de varias losas del techo del porche de entrada. La Junta de Andalucía, administración a quien tiene cedida el Gobierno central la gestión del espacio, ya ha dado el visto bueno a unas obras de emergencia, no sin antes reprochar al Estado que no se haga cargo de una actuación que, a su juicio, le corresponde.
La respuesta a estas afirmaciones ha llegado este miércoles de la mano de la Subdelegación del Gobierno en Huelva, indicando al respecto que la Administración regional “no ha dado cuenta” al Ministerio de Educación, Cultura y Deporte de este incidente, “incumpliendo así el protocolo de comunicación previsto entre las dos administraciones al ser una gestión transferida a la comunidad autónoma”.
Según han indicado a Viva Huelva desde la Subdelegación del Gobierno, la Junta de Andalucía “no ha trasladado al Ministerio la necesidad de realizar ninguna intervención en el Museo”. Así, han precisado que será el Ministerio quien se pondrá en contacto con la Junta de Andalucía para reclamar información de primera mano sobre lo acontecido, al tiempo que enviará a un técnico para evaluar ‘in situ’ el estado del Museo Provincial de Huelva.
Precisamente, según ha podido saber este periódico, técnicos de la Consejería de Cultura visitaban el espacio museístico para evaluar el estado del inmueble, si bien no han trascendido por el momento más detalles. De hecho, por ahora sólo se sabe que el museo está cerrado y así permanecerá hasta que finalicen unas obras de las que no hay más detalles.
Desde la Asociación Amigos del Museo Onubense (AMO) esperan que estas actuaciones no se demoren mucho en el tiempo y creen que este incidente pone de relieve la “necesidad” de contar con otro espacio museístico en Huelva, precisamente ese Museo Arqueológico en el Banco de España que con tanto ahínco llevan tiempo demandando.
Su presidenta, Blanca Romay, recuerda que el Museo de Huelva “es un edificio de muchos años y desde 1973 no se ha hecho nada, sólo la instalación de aire acondicionado gracias a una subvención”. Por ello, aunque reconoce que el edificio está bien cuidado “por la especial protección a lo expuesto”, teme que al inspeccionar el edificio surjan más problemas.
