El domingo 4 de marzo, dentro de los actos de los 800 años de fundación de la Orden Mercedaria, la comunidad de Jerez convoca un singular acto: la exposición de la réplica del sudario con el que fue amortajado Cristo, pieza que es una réplica de la original Sábana Santa que se conserva en Turín y que posee el cenobio jerezano desde el siglo XVII.
Ese día se expondrá en un ostensorio para su veneración. Por la tarde, a las 18,30 horas, se desarrollará el rezo de las Cinco Llagas, seguirá una misa y se procederá al cierre del acto. Reconocen en la comunidad mercedaria jerezana que esta ‘otra’ Sábana Santa se tocó y se depositó junto a la síndone de Turín, por lo que se puede considerar como una reliquia u objeto de culto.
El Centro de Estudios Históricos Jerezanos descubrió cómo en muchos documentos escritos por historiadores se hacía referencia a una Sábana Santa en el Convento de La Merced, incluso en un inventario de la desamortización de La Merced, de 1843. La mortaja se exponía públicamente en agosto. Tanta era la devoción popular a la reliquia que la gente llevaba ropa y objetos de personas enfermas y la pasaban por la tela.
Asimismo se convocaban cultos y actos en torno a la Sábana Santa mercedaria. Una inscripción en una de sus esquinas, junto a un remiendo, da fe de que esta sábana tocó la original de Turín. Y aunque la pintura de la tela, que copia las líneas de la original, no son de una gran calidad, se conserva en perfecto estado ya que ha sido abierta en muy pocas ocasiones. El culto se perdió en el siglo XIX.
Permanecía en un relicario, conservada en una urna realizada en 1849, prácticamente sin tocar desde que llegó a la ciudad desde Roma. Los expertos aseguran que hay sábanas santas en varios puntos de Europa, pero en España parece que tan sólo hay tres: en el Monasterio de Silos, en Torres de la Alameda (Madrid) y en Jerez. Pero ‘tocadas’ con la original, sólo están estas dos últimas.