La compraventa de viviendas experimentó un crecimiento del 1,28 por ciento a lo largo del pasado ejercicio, según los datos divulgados ayer por el Ministerio de Fomento. En concreto, en 2017 se registraron 1.819 transacciones inmobiliarias, frente a las 1.796 del año anterior. Con estos datos, las operaciones regresan a niveles de 2010, cuando se contabilizaron 1.817 compraventas. Además, se consolida la recuperación ya observada en ejercicios anteriores, si bien lo hace con cierta timidez.
Como suele ser habitual, la mayoría de las transacciones se corresponden con viviendas de renta libre, suponiendo estas operaciones el 83,01 por ciento del total. La compraventa de viviendas de protección oficial (VPO) representó en 2017 el 16,98 por ciento de las transacciones.
Según Fomento, en Jerez se transfirió el año pasado la titularidad de 1.510 viviendas de renta libre, un 0,59 por ciento menos que en 2016. Por el contrario, las operaciones de VPO experimentaron un crecimiento del 11,55 por ciento, pasándose de 277 a 309.
Atendiendo a la antigüedad de los inmuebles transferidos, sobresalen las operaciones protagonizadas por las viviendas de segunda mano, que coparon en 2017 el 96,09 por ciento del mercado. En concreto, se vendieron 1.748 pisos de segunda mano, un 2,28 por ciento más que el año anterior. Por el contrario, descendieron las compraventas de viviendas de nueva construcción, que supusieron el 3,90 por ciento del total y que experimentaron además un descenso de las operaciones del 18,39 por ciento, pasando de 87 a 71.
La evolución del mercado sigue siendo positiva en términos globales, si bien el sector inmobiliario se encuentra muy lejos de alcanzar los registros previos al inicio de la crisis económica y financiera. No hay que olvidar que en Jerez se llegaron a vender 4.907 viviendas en 2005, en plena burbuja inmobiliaria. Ya en los años 2006 y 2007 se cayó hasta las 4.326 y 4.259 operaciones, respectivamente; siendo en 2008 cuando se produjo el auténtico desplome del sector, registrándose 2.757 operaciones. La tendencia negativa se mantuvo en 2009, que cerró con 1.658 transacciones inmobiliarias, una cifra que ya se mejora incluso este año.
El sector tocó suelo en 2013, un año en el que únicamente se vendieron 885 propiedades. A partir de entonces se inició una tendencia favorable que se ha mantenido en 2017, si bien la recuperación sigue siendo bastante moderada.
Este año pasado se cerraron prácticamente cinco operaciones diarias, cuando en 2005 se llegaban a registrar hasta 13,44 transacciones inmobiliarias cada día. En cualquier caso, parece difícil pensar que en algún momento puedan repetirse los datos previos al inicio de la crisis.