El Gran Premio que todo motero debe vivir para repetir

“¿Qué motero no es seguidor de Ángel Nieto?”. La pregunta de Ángel, su tocayo de Santander, que ha castigado su voz llamando a Márquez, Lorenzo, Pedrosa cuando se marchaban tras descubrirse el busto del 12+1 veces campeón del mundo de motociclismo suena casi a retórica. Él y su novia Itziar, que consiguió más de un selfie con sus pilotos favoritos, sabían que de este año no podía pasar, tenían que conocer el ambiente del Gran Premio de España en Jerez, y el martes llegaban a El Puerto de Santa María, donde se alojan, para moverse desde ahí y vivir esta cita, dentro y fuera del trazado de velocidad. “Es la primera vez que venimos a Jerez, y es el Gran Premio que más ganas tenemos de ver”, explicaban a este medio, mientras seguían trazando su hoja de ruta.

Samuel Gonzalo es de la casa, o casi. Sevillano, llegó el pasado viernes, y se quedará en casa de su novia, muy cerquita, en Sanlúcar de Barrameda. Lleva siete años sin perderse el Gran Premio, y aunque también intenta a acudir a otras competiciones por el territorio nacional, tiene claro que al de Jerez no puede fallar. La única pega que pone este año es que los homenajes a la leyenda del motociclismo español hayan llegado a título póstumo. “Se le debería haber dado tributo antes, en vida, porque ahora lo va a ver su familia, pero él no va a vivir nada”. Aunque un fatídico accidente se lo llevó de forma repentina el pasado verano, tiene claro que ha habido muchos años para reconocer su trayectoria.

Mientras tanto, Fran y Sonia, dos moteros madrileños, echan el ojo al Parque González Hontoria, donde ya se han enterado que a la Feria del Caballo le quedan horas para dar comienzo. La mayoría viene informados y casi todos saben que este año el Real convive con las carreras. Ellos no son veteranos. También es su primera incursión con la catedral del motociclismo y ahora mismo lo que se preguntan es por qué no han venido antes. “El ambiente pinta muy bien”, señalan. Llegaron el martes, aprovechando el puente por la festividad de la Comunidad de Madrid, y piensan aprovechar sus vacaciones hasta este domingo y vivir intensamente el Gran Premio pero desde sus entrañas.

¿Cómo?Pues tras haberse alojado en El Puerto, desde el viernes no pierden detalle de nada de lo que ocurra en el trazado de velocidad y para ello  se quedan en la acampada. Estos días previos han estado conociendo la provincia, y ahora les toca no perder detalle de la fiesta de las dos ruedas en Jerez, que también recibe estos días a aficionados de todos los rincones del mundo. Es el caso de Marzi y Müler, un matrimonio que viene desde Alemania y que desde hace ocho años no se pierde su visita obligada a Jerez.

El tiempo no les ha acompañado lo que esperaban estas dos semanas que están en la provincia, pero tienen claro que la estampa sigue siendo una de sus favoritas con o sin lluvia. Se quedan en Zahara y lo tienen todo perfectamente organizado. Estos días van a estar viviendo “a tope” la movida motera en el Circuito de Jerez y sus previas, como la caravana motera del pasado jueves que esperaron a las puertas de la portada principal de la Feria, en la avenida Álvaro Domecq. La tienen apuntada en su agenda, pero para el último fin de semana. “Este vamos a estar por el circuito”, señalan convencidos de que para el año que viene repetirán.Pero, ¿qué pasa en Jerez? ¿Cómo viven los moteros autóctonos estos días?

Por un lado, están los motoclubes jerezanos que ejercen de anfitriones con “cervezadas” de bienvenida y convivencias en el propio Real, como el Club Cherokee de Jerez, una institución en este mundillo, y que este año está recibiendo a los moteros en su caseta de El Rincón Cherokee. En el otro, están los grupos de amigos que se mueven entre el Circuito de Jerez y el casco urbano, y los que hacen iniciativas curiosas como es el caso de la “gran quedada” que organizó el colectivo Mujeres Moteras del Sur para conseguir reunir el máximo número de mujeres en moto para una foto. Y surge otra pregunta ¿Se puede ser un ‘loco’ de las carreras de motoGP sin moto? “Una vez que estás dentro del Circuito vives el ambiente igualmente, si te vas a la avenida no hace falta tener la moto para disfrutar del ambiente. Si te gustan las motos, y para mí esta es mi semana favorita del año, te da igual madrugar, pasar calor, el ruido, estar sin asiento incluso”, señala Pepa Molina, de 22 años, que este viernes hacía cola desde primera hora de la mañana para conseguir un ticket del trazado para entrar por la tarde durante una hora en el Pit-Lane. Y no tiene moto, ni piensa tenerla.