Durante su estancia de una semana en España, Txeroki estará sujeto al régimen más estricto de aislamiento penitenciario, lo que implica que comerá en su propia celda y sólo podrá salir durante dos horas al día a un patio separado del resto de los reclusos.
El etarra comparecerá hoy ante los jueces de la Audiencia Nacional Santiago Pedraz e Ismael Moreno, quienes le comunicarán su procesamiento por cinco atentados cometidos en 2002, entre ellos, el intento de asesinato del dirigente socialista Eduardo Madina.
Por entonces, Garikoitz Aspiazu integraba el comando K-Olaia, llamado así en recuerdo de la etarra Olaia Castresana, que murió en 2001 mientras manejaba un artefacto explosivo en Torrevieja (Alicante).
Txeroki tiene abiertos además otros 16 procesos en la Audiencia Nacional y, entre ellos, figura el atentado de la T-4 de Barajas, el 30 de diciembre de 2006, que supuso la ruptura real del alto el fuego decretado por ETA en marzo de ese año y que acabó con la vida de dos ciudadanos ecuatorianos.
La Fiscalía investiga también su presunta participación en el asesinato de los guardias civiles Raúl Centeno y Fernando Trapero el 1 de diciembre de 2007 en Capbreton (Francia), después de que cada vez haya más indicios que le sitúan en la escena del crimen.