El Ayuntamiento de Sevilla, a través de la Gerencia de Urbanismo, ha otorgado ya la licencia de obras para construir un edificio de 30 viviendas, once locales comerciales y 92 plazas de aparcamiento en tres plantas de sótano en la manzana de La Barqueta, una promoción desarrollada por Acciona Inmobiliaria y que contempla mantener la fachada original. Se contemplan, además, diez plazas de aparcamiento para bicicletas y 30 trasteros.
En un comunicado, el Ayuntamiento ha indicado que se desbloquea así un proyecto "enquistado desde hace más de una década", concretamente trece años, dotando de uso residencial a un edificio hasta ahora degradado a las puertas del barrio de la Macarena. El inicio de esas obras es inmediato y la entrega de las viviendas se prevé realizar en 2021. El edificio, bautizado como Puerta Barqueta, contará con el sello de certificación sostenible internacional Breeam.
El conjunto edificado se organiza en torno a un amplio patio central con sus accesos desde la calle Torneo y la planta baja de la casa tapón situada en la calle Blanquillo. La distribución parte de la compartimentación original de las viviendas en las calles Vib-Arragel, Torneo y Resolana, donde se proyectan tipologías desarrolladas en dos niveles con fachadas al exterior y al patio central desde donde tienen el acceso.
El resto de viviendas se distribuye en torno a los dos núcleos comunes independientes de la calle Blanquillo y uno en la calle Vib-Arragel. El diseño persigue potenciar la luz y la espacialidad mediante la variación de alturas, el empleo de materiales livianos y naturales y la integración de estancias.
Este proyecto mantiene la configuración original de la fachada y la primera crujía, recuperando huecos, elementos y materiales originales que habían ido perdiéndose en sucesivas reformas acaecidas. Asimismo, se pretende dotar de homogeneidad a la imagen exterior, recuperando la unidad estilística con la que José Espiau y Muñoz dotó a la manzana.
Su interior se proyecta con un lenguaje arquitectónico más actual, potenciando el contraste entre las partes protegidas y las zonas de nueva construcción. El patio se diseña con formas orgánicas con predominio de las curvas y líneas horizontales, construyendo una imagen más suave y amable del espacio común de la edificación.
El contacto entre las zonas privadas y comunes, o entre los espacios comerciales y residenciales, se resuelve mediante celosías metálicas y jardineras que conformarán tamices visuales "sin perder la amplitud espacial".
La manzana Barqueta se edificó en los terrenos de la antigua plaza Vib-Arragel a finales del siglo XIX. En el siglo XX, el arquitecto José Espiau y Muñoz intervino en el edificio en cuestión, ampliándolo y formalizando la fachada que actualmente aún se conserva.