Las tres piscinas municipales, finalmente, no abrirán el mismo día. El Tomillo y La Salobreja lo harán el 1 de julio, como estaba previsto y adelantó VIVA, pero Las Fuentezuelas abrirá el 8 de julio, debido a las obras que se ejecutan en estas instalaciones.
Así lo ha confirmado este jueves el concejal de Deportes, Carlos Alberca, tras el Consejo Rector de Deportes. La previsión de cierre es el 7 de septiembre, una fecha abierta a cambios por las condiciones meteorológicas, con la posibilidad de prolongar el funcionamiento si es necesario.
Con un presupuesto de 40.000 euros, en la piscina de Las Fuentezuelas se están renovando los vestuarios, para “una mejor higienización y limpieza”; y se está adecuando la solería que, con su inestabilidad, ha causado “numerosos accidentes menores”. “Estamos trabajando con intensidad para tenerlo todo listo para disfrutar con seguridad del verano”, remarcó Alberca.
Para mantener las medidas de seguridad y distanciamiento social, el aforo será del 75%. Se duplicará el protocolo de limpieza y desinfección y, además, éste se ajustará al aforo que haya en cada momento. Se observarán las medidas de distanciamiento social, por cuyo cumplimiento velará el personal municipal, y habrá jabones de manos e hidrogeles a la salida y entrada de las dependencias.
Los vestuarios funcionarán con la excepción de las duchas, que sólo estarán disponibles en el exterior, junto a la piscina, para usar antes de entrar en la misma.
Este año no habrá servicio de bares en las piscinas. Desde el Ayuntamiento lo consideran “desaconsejable”, y así “evitar posibles focos de contagio de coronavirus”. Habrá un sistema de bonos para los usuarios.
La fecha de apertura de las piscinas municipales se ha aprobado en el seno del Consejo Rector y la medida no contó con el voto favorable del PP, que manifestó su abstención, como para la apertura de las Escuelas Deportivas de Verano.
Vox señaló su postura contraria a ambas aperturas, votando en contra.
“Este tipo de actividades, que no tienen tinte político alguno, no deben de estar sujetos a utilización. Solo se busca prestar un buen servicio público y desde luego, en el caso de las escuelas deportivas entendemos que se cumple con un aspecto clave como es la conciliación de la vida laboral y familiar que tanto demanda la oposición con otros servicios”, razonó Alberca.