El tiempo en: Vejer

Almería

El padre del niño muerto en Almería dice que tenía "miedo" de ella

Ésta lo iba "acolarrando" cada vez "más", así como que lo mató para hacerle "daño" a él y a su familia

Publicidad Ai
Publicidad Ai Publicidad AiPublicidad AiPublicidad Ai Publicidad Ai
Publicidad Ai
Publicidad Ai
  • Juzgados de Almería. -

Sergio Fernández, el padre del niño de 7 años presuntamente asesinado por su madre en Almería, ha asegurado hoy ante el jurado popular que juzga a la mujer que su hijo tenía "miedo" de su progenitora y que ésta lo iba "acolarrando" cada vez "más", así como que lo mató para hacerle "daño" a él y a su familia.

Así lo ha manifestado durante su declaración en la tercera sesión de la vista oral que se celebra en la Sección Segunda de la Audiencia Provincial de Almería, asegurando que el niño tenía "esperanza" ante la posibilidad de que le diesen la guarda y custodia a su padre, pero que la acusada tenía una "actitud cada vez más violenta" con el pequeño y lo tenia "más presionado".

"Nos daba miedo. Teníamos más miedo de un accidente de tráfico porque no paraba en la casa (?) Tenía al niño de una casa a otra", ha declarado.

Ha explicado que el 10 de octubre de 2019, día en el que su expareja Ana María B.L. mató a Sergio, se enteró de la muerte tras recibir una llamada del padre de la acusada. "Estaba en mi trabajo visitando a unos clientes, empezó a sonarme el teléfono y era el padre de Ana. Me dijo que al niño le había pasado algo y al momento me dijo que había fallecido", ha apuntado entre lloros.

El hombre se trasladó hasta la residencia de la acusada en Huércal de Almería, dónde encontró a la Guardia Civil. "Me dijeron que intentaban reanimarlo pero yo ya sabía que el niño estaba muerto", ha aseverado.

Ha explicado cómo la actitud de la acusada cambió tras el nacimiento de Sergio, asegurando que ésta no permitía, por ejemplo, que nadie se hiciera una foto sin ella con el menor o que éste fuese a solas con él a ningún lado, o cómo la relación entre ambos fue deteriorándose hasta que lo denunció por malos tratos en abril de 2017, apuntando que había intentado envenenarlos a ella y al pequeño.

El progenitor fue finalmente absuelto y a partir de ese momento, ha afirmado, comenzó una situación de "acoso" con llamadas y mensajes de WhatsApp continuos para retomar la relación "por el niño". "Era continuamente un martilleo", ha dicho el padre, apuntando que incluso tenía que ir acompañado por sus familiares al recoger a su hijo porque la mujer "se enganchaba" al coche y temía nuevas denuncias.

Al ser interpelado sobre si el temor del niño a su madre había aumentado los meses previos a la muerte, ha sostenido que estaba "nervioso" y "coartado" cuando hablabas con él. "Estaba esperanzado con que se iba a venir conmigo. Me preguntaba si no me habían dicho algo la abogada o la fiscal -tras el juicio por el que se le concedió la guarda y custodia-. Le decía que esa semana me dirían algo y me decía: Es que mamá me va a pegar", ha relatado.

Ha desvelado que el mismo día que murió Sergio su abogada recibió la notificación que le concedía la custodia.

También han declarado, entre otros, los abuelos paternos y un tío del niño, que han ratificado lo manifestado por Sergio Fernández. María Gádor, la abuela, ha afirmado que tenían "la mosca detrás de la oreja" por lo que el niño contaba.

La abuela ha contado cómo el 23 de septiembre de 2019 recibió dos mensajes de audio del pequeño. "En el primero decía, abuela, llama a papá, que mamá me está haciendo daño. El otro audio decía, abuela, llama a papá, que me está pegando, llorando pero callandico", ha dicho.

"Ella todo lo que quería era ver si podía hacerle algo a mi hijo", ha mantenido, relatando un episodio en el que fueron en busca del pequeño Sergio un día en el que Ana María comenzó a llamarlos a primera hora para confirmar si iban a recogerlo al colegio.

Ha asegurado que el menor no estaba en clase y que la presunta asesina los engañó diciendo que sí. Los abuelos fueron al centro educativo pero un tío del niño en el lugar y "vio que lo tenía escondido en el garaje". "Cuando llegaron al colegio, Sergio le dijo: Dile ahora a los abuelos y al tite a dónde tenías pensado llevarme y lo que querías hacer conmigo", ha relatado. 

TE RECOMENDAMOS

ÚNETE A NUESTRO BOLETÍN