El Colegio de la Salle de Sanlúcar de Barrameda ha recibido la VI Insignia de Oro de la Hermandad del Silencio. El motivo de este reconocimiento se debe a la labor realizada por el personal docente, no docente y voluntarios del centro educativo durante la pandemia del COVID-19.
La Hermandad Lasaliana del Silencio entregó en el transcurso de la solemne eucaristía a María Santísima del Amor su VI Insignia de Oro al personal docente, no docente y voluntarios del Colegio de la Salle San Francisco, con el les une una gran vinculación.
La junta de gobierno acordó en cabildo de oficiales hacer entrega de este galardón que en tan excepcionalmente se realiza, pero que, según las palabras de su hermano mayor, Carlos Jiménez, “son merecedores de tal distinción por el trabajo realizado por todas estas personas que conforman la comunidad educativa, sobre todo los alumnos, desde que comenzó la pandemia del COVID-19 el pasado 14 de marzo de 2020, primer día de Estado de Alarma”.
Por su parte, durante el acto, el director del Colegio La Salle, Pedro María Álvarez, agradeció a la junta de gobierno la entrega de esta distinción.
Subrayó que no tiene palabra de agradecimiento a toda la hermandad en su conjunto, ‘a la hermandad del colegio’, porque “desde el primer instante se puso en contacto y en disposición para que no le faltara de nada al centro en general y los alumnos en particular. Esta insignia estuvo enmarcada en una orla de papel, diseñada y pintada por el artista sanluqueño Jesús Guerrero, que la hermandad adquirió para esta concesión.
A la solemne eucaristía, donde se procedió a la entrega de este reconocimiento, acudieron multitud de hermanos de esta lasaliana hermandad, alumnos del Colegio y todo el claustro de profesores que lo conforma.
Un colegio, La Salle, por el que han pasado miles de sanluqueños en su historia.