Absuelven acusado maltrato, amenazas e injurias gracias a un vecino

El Juzgado de lo Penal número 5 de Almería ha absuelto gracias al testimonio de un vecino a un hombre acusado por delitos de maltrato, amenazas e injurias en el ámbito de la violencia de género y familiar tras la denuncia de una mujer con la que mantenía una relación fuera de su matrimonio.

La sentencia, consultada por Efe, recoge que la supuesta víctima denunció el pasado 24 de abril ante la Guardia Civil a M.T., un hombre con el que según ella había mantenido una relación sentimental durante ocho años, siendo novios hasta el 2017, cuando decidieron dejarlo durante "tres meses" debido a una acta de matrimonio que había resultado ser falsa.

La mujer relató entonces y posteriormente ante el juez que fue el procesado el que la llamó durante la madrugada del 24 de abril para que acudiese a su domicilio en El Ejido, al que ya había ido previamente cuando M.T. "se peleaba con su mujer".

Afirmó que al llegar el acusado le abrió la puerta y le dijo "puta", que se fuese porque estaba con él su esposa; que la golpeó y la cogió del cuello pegándole con un palo y diciendo que la mataba.

La denunciante manifestó además que el acusado se encontraba en su domicilio con su mujer y sus dos hijos, algo que no sólo fue negado por éste, sino por la propia esposa de M.T. durante la vista oral, apuntando ésta última que en ese momento estaba en casa de unos familiares.

El acusado negó durante la vista oral la realidad de lo denunciado y defendió que no la había amenazado ni injuriado, que la supuesta víctima era "una chica a la que conocía y que le pagaba por tener relaciones sexuales".

Aseguró asimismo que la mujer le había dicho que "si no se casaba con ella", lo iba a mandar "a prisión", punto negado por la denunciante, y que hacía dos o tres años que no la veía, precisando que sólo tuvo una relación con ella entre 2010 y 2012.

Dijo asimismo que el 24 de abril fue ella quien lo llamó por teléfono dos veces y que sólo atendió una de las llamadas, realizada desde un número que no conocía, y que más tarde la mujer se presentó en su casa pero no le abrió.

M.T. sostuvo además que la supuesta víctima aprovechó que había una ventana entreabierta para introducir un palo y golpearlo con él, y que no abrió la puerta hasta que llegó la Policía Nacional.

Un vecino que vive pared con pared relató por su parte que vio a la denunciante golpeando la ventana con un palo y mientras decía que si el acusado no se casaba con ella "lo mandaba a la cárcel", que la mujer decía palabrotas y el acusado salió a la calle al cabo de unos diez minutos cuando llegó la Policía Nacional, subrayando que no agredió a ésta ni escuchó amenazas.

El juez dice que a raíz de estos testimonios, surge "una duda razonable sobre la realidad de lo ocurrido, que no puede venir tampoco aclarado por la existencia de un parte de lesiones -de la supuesta víctima- cuando consta otro del mismo modo del acusado".

Señala que la denunciante mostró una serie de fotografías durante una celebración, que según el acusado eran de un "compromiso de matrimonio" contraído con anterioridad", algo que para el juez "no hace sino acreditar una relación sentimental entre ellos".

Así, el juez aplica el principio de 'in dubito pro reo" y absuelve libremente al procesado de los delitos de maltrato, amenazas e injurias en el ámbito de la violencia de género y familiar que le imputaban el Ministerio Público y la acusación particular, y deja sin efecto las medidas cautelares dictadas el 25 de abril de 2018 contra él.