El tiempo en: Vejer
Publicidad Ai
Publicidad Ai

La novena provincia

Capitanía Marítima, ¿en qué manos estamos?

Publicidad AiPublicidad Ai
Publicidad Ai
Un nuevo accidente en nuestra Bahía, en este caso, un embarrancamiento, como ha sido el del Rhea en la playa de El Rinconcillo. Hace sólo dos meses fue el Shenzhen el que produjo una marea negra importante y nos libramos de una gran catástrofe medioambiental gracias al increíble trabajo de Cernaval que logró meter en su dique al barco en ocho minutos porque de no ser así, hoy todavía estaríamos inmersos en una nueva Costa de la Muerte.

En esta ocasión nos ha librado el que el Rhea estuviera en lastre (vacío de carga) cuando se produjo el accidente.

La media de accidentes y varamientos  en la Bahía de Algeciras, viene a ser de dos a tres al año. Esta es una Bahía en la que el tráfico marítimo es intensísimo y el número de barcos fondeados en la misma está alcanzando unas cotas insoportables que si le sumamos los que fondean en Gibraltar puede alcanzar una cifra diaria de más de sesenta barcos, todo un arsenal justo entre nosotros.

Este es el precio que tenemos que pagar por tener el primer puerto de España y el primer polo industrial de Andalucía, además de la colonia británica  y el Estrecho delante. Pero siendo esto así, también las medidas de control deberían ser de la misma proporción que el propio peligro al que estamos sometidos en esta  zona.

Muchas veces he denunciado la responsabilidad por omisión de la Capitanía Marítima que bien ha minimizado en algunas ocasiones los accidentes(el último del Shenzhen lo minimizó hasta que el combustible llegó a la playa de El Rinconcillo y  entonces no tuvo mas remedio que reconocerlo aunque ya era tarde). En otras ocasiones también se han producido vertidos mas pequeños y Capitanía los ha negado o ha dicho que se había limpiado todo y luego nos hemos encontrado el vertido en la playa.

En definitiva que quien tiene la responsabilidad y la autoridad en la Bahía es Capitanía,  y no desarrolla su cometido ni por asomo, llegando al colmo del patetismo con las declaraciones del propio Capitán Marítimo.
En este último caso,  en las que alega textualmente que el Rhea desoyó las órdenes de ayuda con los remolcadores que le hacía la propia Capitanía. ¿Es qué no tiene autoridad para imponer esas órdenes?, ¿Y si un buque que está vertiendo combustible también desoye las órdenes?, ¿Qué ocurre?, ¿Sigue vertiendo? Las declaraciones del Capitán Marítimo suenan a risa si no fuera por lo grave que es el asunto y que nos hace ver en manos de quien estamos.

Se necesita en esta Bahía una verdadera Autoridad Marítima, que  actúe con energía y con medios, y que no se mediatice y asuste tratando de minimizar los accidentes que vienen ocurriendo. Porque, como diría alguien que yo conocía, hasta ahora nos está librando San Ro-Ro, pero estamos siempre en el filo de la navaja y cualquier día ocurre una desgracia de consecuencias incalculables en esta Calle del Agua que es el Estrecho y esta Bahía en la que todos vivimos.

TE RECOMENDAMOS

ÚNETE A NUESTRO BOLETÍN