El juez de la Audiencia Nacional Joaquín Gadea ha enviado a prisión provisional a los dos detenidos esta semana en Melilla y Madrid por adoctrinar presuntamente a jóvenes y reincidir en los postulados yihadistas tras ser condenados hace años por pertenencia o integración en organización terrorista.
La Policía Nacional desplegó el lunes una operación contra el terrorismo yihadista que culminó en el arresto de Mustafá Maya Amaya y Deniz Ibryam Redzhen, que estuvo encuadrado en la autodenominada "Brigada Al Andalus", quienes se encontraban en libertad tras haber cumplir sendas condenas de ocho años de cárcel por terrorismo.
Tras pasar este jueves a disposición judicial por videoconferencia, el magistrado Joaquín Gadea ha decretado para ellos prisión provisional comunicada y sin fianza "por un presunto delito de terrorismo yihadista", según informan a EFE fuentes jurídicas.
Ambos están investigados por su presunta participación en labores de adoctrinamiento metodológico, principalmente en jóvenes, utilizando aplicaciones de mensajería, según informa la Dirección General de la Policía, que destaca en un comunicado la continuidad de los dos detenidos "en los postulados yihadistas".
Tras ser excarcelados, los arrestados habrían retomado sus contactos con personas afines a la yihad para realizar "acciones violentas de manera conjunta o individual" y habrían publicado en redes material yihadista explícito, proveniente del aparato propagandístico de las organizaciones yihadistas.
Maya Amaya, un melillense converso de origen belga, salió en libertad el 11 de marzo de 2022, tras cumplir la condena de ocho años que le impuso la Audiencia Nacional por pertenencia a organización terrorista en calidad de promotor después de llegar a un acuerdo de conformidad con la Fiscalía por el que confesó que ayudó a enviar combatientes a Siria, Libia o Mali para "hacer la yihad".
Junto a él fueron condenadas cinco personas por integrar o colaborar con una red dedicada a reclutar combatientes, que tenía ramificaciones en países como Marruecos, Bélgica, Francia, Túnez o Turquía, considerada por la Audiencia "una de las mayores redes de captación y envío de radicales para su incorporación a organizaciones terroristas de corte yihadista", que realizó "una incesante labor" desde 2012 "nutriendo a otras organizaciones" como el Estado Islámico o Jabhat Al Nusra.
Deniz Ibryam Redzhen, por su parte, también fue detenido en 2014 y, tres años más tarde, el Tribunal Supremo confirmó su condena a ocho años de prisión por integración en organización terrorista.
Fue juzgado junto a otros integrantes de la autodenominada Brigada Al Andalus, localizada e Madrid y que dirigía el expreso de Guantánamo Lahcen Ikassrien, dedicada a labores de captación y adoctrinamiento de yihadistas.
Tras la comparecencia de ambos este jueves, la Fiscalía ha solicitado para ambos prisión provisional al considerar que podrían haber incurrido en los delitos de enaltecimiento, autoadoctrinamiento, adoctrinamiento sobre terceros y autocapacitación, todos ellos con fines terroristas.
Los motivos que ha alegado el fiscal para justificar su petición riesgo de fuga, ocultación de fuentes de prueba y riesgo de comisión de otros hechos delictivos, han informado fuentes jurídicas.