Debido a las lluvias acaecidas en el mes de diciembre, se hace necesario el secado de la calle, con la intención de que el albero de las capas inferiores que debe sostener el hormigón aguante el paso de los años y se hagá la obra en condiciones, como bien explica el concejal de Comercio, Francisco Aguilar. Como estos días además las previsiones meteorológicas son halagüenas, puesto que parece que va a lucir el sol, hay más motivos para confiar en el rápido secado de esta calle, a pesar de que algunos vecinos cercanos se muestran más reticentes. “Si esta calle es demasiado sombría, por mucho que no llueva, apenas le da el sol, así que es igualmente complicado que se pueda secar la arena, pero confíemos en que así sea porque esta zanja no hace más que afear este sitio”.
El paso próximo al hormigonado será pavimentar, actuación que está más cercana si cabe debido al buen tiempo, reseña el edil popular.
Así, muestra cautela al igual que la pide a los ciudadanos en este sentido, para que los trabajos se hagan en tiempo y forma, sobre todo con afán de que el hormigón dure en el tiempo y no ceda o reviente dentro de unos años, lo que significaría tener que volver a levantar la calle para arreglarla, una actuación que el equipo de Gobierno confía en no tener que hacer.
Con todo, la empresa constructora bajaró otra opción, siempre con la intención de agilizar el proceso de la obra de Urbanismo Comercial, y no es otra que retirar el albero y la tierra mojada, por medio de un proceso que se llama cajeado, pero informa el concejal de Comercio que este proceso sería más costoso, suponiendo las labores además varios días más de trabajo mientras que los operarios retiran la arena mojada y colocan la seca, lo que haría que igualmente se tuviera que esperar hasta el próximo lunes para echar la capa de hormigón, por lo que así se ahorra el coste adicional que tendría dicho tratamiento específico.
Así, zanja Francisco Aguilar el tema indicando que, como igualmente se ralentizaría el procedimiento hasta el lunes, es mejor dejar secar, debido a las previsiones de sol para el fin de semana, y ya poder comenzar el lunes con la siguiente fase.
Por otro lado, quiere informar Aguilar también del contenido de la reunión técnica que se llevó a cabo el pasado miércoles, en la que se encuentran representadas todas las partes implicadas, como Comercio, Infraestructura, dirección de obra y empresa.
Así, se fijó un calendario de obras futuro. De momento, en Micaela Aramburu esta semana se ha procedido a echar el pavimento a la acera (habiendo ya gran parte del afectado que se ha colocado, concretamente de la margen derecha de la vía), mientras que se seca la zona de la calzada, para acometer el hormigonado.
En cuanto a Jesús de los Milagros, tras el parón de la época navideña, se procedió a principios de semana a destapar las zanjas que se tapiaron para extremar la seguridad de los peatones y transeúntes, pues cabe recordar que el área que regenta el edil popular había propuesto, entre otras tantas actividades, un mercadillo en dicha calle. Por el momento ya se han iniciado los trabajos de saneamiento y cableado, actuación de Endesa así como se están realizando al mismo tiempo los trabajos en el tramo de La Herrería hacia Palacios, en este sentido.
La previsión de la mesa técnica en este sentido es que esta próxima semana se comience a acometer la colocación de tubos en el primer tramo de la calle, puesto que ésta que expira ya se ha hecho en el segundo, correspondiente a la zona comprendida entre la plaza de la Herrería y la calle Luna.
Se cumple así con la previsión realizada por parte de la comisión de seguimiento.
Coordinación en todos los sentidos
La coordinación entre las áreas implicadas en esta obra, siendo en este caso Mantenimiento Urbano y Comercio, es siempre impecable, por lo que ese sentido poco hay que achacar a la conducta del equipo de Gobierno. También es cierto, como indica el edil de Comercio, que en Navidad se hizo un parón debido a la petición de los comerciantes de las principales calles afectadas, por lo menos para poder recuperar un poco la cuota de mercado, pero la verdad, y como ha comprobado este medio, es que es una realidad que no se ha podido salvar la temporada navideña puesto que la población en general intenta evitar las calles que están en obras, debido a que son más molestas y consideran que poco aportan a su calidad de vida en estos momentos.
