El Racing de Santander recibe en El Sardinero con un equipo de circunstancias, por las numerosas bajas de teóricos titulares, a un Real Madrid enrabietado, que llega con la lección aprendida ante equipos modestos tras sufrir la primera derrota de la temporada en el Ciudad de Valencia ante el Levante.

Obligado a reaccionar llega el equipo de José Mourinho a Santander, donde se verá beneficiado por las circunstancias que sufre el Racing, pendiente de recuperar a su capitán Pedro Munitis y de que salga de un largo parte de bajas.

El partido ante el Real Madrid no llega en un buen momento para el equipo de Héctor Cúper, que tras sumar sólo un punto en los tres partidos disputados, recibe a un Real Madrid con ganas de levantarse del primer golpe.

A eso hay que unir que el Racing tiene a seis jugadores lesionados Colsa, Torrejón, Kennedy, Arana, Acosta y Munitis, de los cuales únicamente este último ha entrado en la lista de convocados, pese a no estar plenamente recuperado de su esguince de tobillo.

La escasez de efectivos, unida al potencial del Real Madrid, podría hacer que Héctor Cúper se decante por abandonar el sistema 4-4-2, para jugar con un 4-2-3-1 dejando como único delantero al uruguayo Christian Stuani.

Por detrás estarían Munitis o el juvenil del filial Jairo en banda derecha, Oscar Serrano en la izquierda y Adrián González por el centro. Una línea de tres inédita formada por un jugador que acaba de volver a los campos tras permanecer siete meses en el dique seco (Serrano), otro renqueante (Munitis) o muy bisoño (Jairo) y un tercero (Adrián) más habituado a jugar en banda.