El exministro de Trabajo y portavoz económico del PSOE en el Congreso, Valeriano Gómez, y el secretario de Acción Sindical de CC.OO., Ramón Górriz, han coincidido este viernes en señalar que la ley de servicios mínimos que quiere poner en marcha el Gobierno "no se puede negociar en caliente", tras un gran conflicto laboral como el de los trabajadores de la limpieza en Madrid.
Gómez, en declaraciones a RNE recogidas por Europa Press, ha asegurado que el anuncio del presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, de que trabaja en una ley de servicios mínimos "no le gusta" y ha defendido que la regulación actual, que parte de un decreto preconstitucional, se ha ido adaptando con el paso del tiempo.
En su opinión, lo deseable sería que sindicatos, empresarios y Gobierno pactaran "en frío", cuando no hubiera un conflicto a la vista, una fórmula de autorregulación que asegure en todo momento el cumplimiento de los servicios mínimos en una huelga, en línea con la fórmula italiana.
Por su parte, el secretario de Acción Sindical de CC.OO., Ramón Górriz, también ha destacado en RNE que una negociación de esta naturaleza "no puede hacerse en caliente" y ha añadido que, aunque es importante la autorregulación, el derecho de huelga, que es un derecho constitucional, debe quedar preservado.
"Nosotros estamos dispuestos a hablar sobre el desarrollo de los servicios esenciales, pero salvaguardando el derecho de huelga (...) Cuando nos sentamos en una mesa nunca hay líneas rojas, pero el derecho de huelga es un derecho constitucional y no vamos a dejar que se acabe con este derecho", ha subrayado Górriz, que ha indicado que en algún gobierno autonómico ya existen acuerdos de servicios mínimos para aquellos servicios que se consideran esenciales.