Más de medio centenar de pacientes de las comarcas onubenses de la Sierra, Cuenca Minera y parte del Andévalo, ámbito de influencia del Hospital de Riotinto, se han beneficiado ya de los servicios que desarrolla la unidad específica de atención al dolor puesta en marcha el pasado verano por el Área de Gestión Sanitaria Norte de Huelva en dicho centro hospitalario.
Según indicó la Junta en un comunicado, la apertura de este nuevo recurso responde al compromiso del Gobierno autonómico de reforzar la calidad del sistema público de salud en esta zona de la provincia y seguir incrementando las prestaciones a disposición de los ciudadanos.
La Unidad de Atención al Dolor es un dispositivo novedoso en el conjunto de la sanidad pública onubense, que permite ofrecer un tratamiento integral y preventivo a los pacientes que sufren dolor crónico de origen no oncológico, facilitándoles el acceso a una nueva alternativa asistencial cuando otras opciones terapéuticas previas como la quirúrgica o la rehabilitadota no han surtido el efecto deseado.
De esta labor se ocupa un equipo multidisciplinar de profesionales, integrado por facultativos anestesistas y personal de Enfermería, que efectúan las consultas y revisiones a los pacientes de manera quincenal, estando prevista que esta periodicidad pase a ser semanal próximamente. En ellas se procede a la evaluación clínica y a la realización de las pruebas complementarias necesarias para catalogar el dolor y establecer a continuación un plan terapéutico individualizado, que ayude a paliarlo a través del uso de terapia farmacológica y técnicas ambulatorias, entre las que se encuentra incluso la acupuntura, de la que hasta el momento se han aplicado más de 20 sesiones.
En cuanto a la cartera de servicios de la unidad, también destaca el empleo de técnicas de un avanzado nivel de especificación, como son los bloqueos epidurales y locorregionales a través de analgesia instrumentada invasiva, que se llevan a cabo en quirófano y se dirigen con ecografía para incrementar la precisión.
Las próximas actuaciones de la unidad se centran en ampliar sus prestaciones con la incorporación de técnicas de electro-estimulación transcutánea y perfusiones ambulatorias, avanzar en la formación del personal y difundir su actividad mediante la constitución de una comisión clínica de atención al dolor en la que participen también los profesionales de los centros de salud de atención primaria del área sanitaria.
Las personas atendidas en este dispositivo han mostrado un altísimo grado de satisfacción con el mismo. En este periodo se han registrado ya incluso varias altas de pacientes a raíz de la notable mejoría lograda en su estado de salud.
Pacientes destinatarios
La población diana de este nuevo servicio, dependiente desde el punto de vista funcional de la Unidad de Gestión Clínica (UGC) Bloque Quirúrgico del hospital, la componen pacientes derivados de otros departamentos, fundamentalmente desde Medicina Interna, Traumatología y Rehabilitación, con diagnóstico de dolor crónico no oncológico y que requieren de esta otra atención especializada para su recuperación.
Se considera dolor crónico aquel que persiste durante más de tres meses, con intensidad moderada y que deteriore la capacidad funcional del paciente. En este caso, los usuarios a quienes va destinada son los que tras un tratamiento anterior no han conseguido controlar el dolor. Entre las patologías más frecuentes incluidas en esta categoría están los problemas osteomusculares y las dolencias neuropáticas.
En este sentido, el dolor tiene serias consecuencias emocionales, sociales e incluso económicas para el paciente, incrementando por cinco la probabilidad de utilización de los servicios sanitarios. Según datos recogidos en un estudio internacional, el 11% de la población sufre dolor crónico a lo largo de una media de nueve años. De ellos, el 22% necesita entre cinco y diez años para alcanzar un control adecuado de este dolor.
Dada la complejidad e incidencia de esta problemática, la Consejería de Igualdad, Salud y Políticas Sociales dispone del Plan Andaluz de Atención al Dolor, único a nivel nacional y que recoge diversas líneas de intervención sobre las distintas variantes de dolor, desde una perspectiva que abarca no sólo su tratamiento, sino también la prevención, promoción de hábitos saludables y formación de profesionales y pacientes. La creación de esta unidad en el Hospital de Riotinto se enmarca en el plan.