La Agencia Estatal de Seguridad Aérea (AESA), dependiente del Ministerio de Fomento, ha inscrito más de 1.000 operadores de drones de menos de 25 kilos al despegue, en el primer año y medio desde la entrada en vigor de la normativa que regula el uso de este tipo de aeronaves tripuladas por control remoto y que han permitido el desarrollo en condiciones de seguridad de este sector tecnológicamente puntero y emergente. En total hay registradas en AESA 1.668 aeronaves pilotadas por control remoto.
Los últimos seis meses el número de operadores habilitados ha experimentado un crecimiento exponencial, se han registrado 685, el doble que los registrados durante el primer año que fue de 335 operadores. Aunque no necesitan una autorización de la AESA, sí deben presentar ante ella una declaración responsable conforme cumplen todos los requisitos que marca la ley e indicar las actividades que van a realizar.
Dentro de estas actividades la principal es la fotografía, filmaciones y levantamientos aéreos (topográficos y fotogrametría) con 960 operadores; para operaciones de emergencia, búsqueda y salvamento, hay 557 operadores habilitados; 327 realizarán actividades de investigación y desarrollo; y 233 trabajan también en fotografía, investigación y reconocimiento instrumental: calibración de equipos, exploración meteorológica, marítima, geológica, petrolífera o arqueológica, enlace y transmisiones, emisoras, receptor, repetidor de radio o televisión.
Para actividades de publicidad aérea hay 231 operadores; 83 para tratamientos aéreos, fitosanitarios y otros que supongan esparcir sustancias en el suelo o la atmósfera, incluyendo actividades de lanzamiento de productos para extinción de incendios; 34 para observación y vigilancia aérea incluyendo filmación y actividades de vigilancia de incendios forestales; y 79 operadores para realizar trabajos especiales.
También se ha autorizado a 67 operadores para realizar vuelos de prueba, demostración o investigación en espacio aéreo no controlado dentro del alcance visual del piloto o en una zona de espacio aéreo segregado al efecto. Y hay cinco operadores de más de 25 kilos que han solicitado autorización para realizar vuelos experimentales.
Otra muestra de este crecimiento y expansión del sector es el incremento de cursos de pilotos de drones. Para impartir estos cursos teóricos que permiten obtener los certificados básico y avanzado para pilotar drones las organización de formación (ATOs), que actualmente ascienden a 58, deben ser aprobadas por AESA.
Además, en el ámbito de la formación práctica hay 26 operadores que la imparten, 20 fabricantes de drones y 21 organizaciones autorizadas por los fabricantes para impartir las clases prácticas de esos modelos de drones.