El padre Juan afirma que “llevamos 15 años reuniéndonos en el Ayuntamiento para hablar del día de los sin techo y de organizar actividades, pero lo que realmente necesitan estas personas es un albergue donde poder quedarse”.
Aunque está por ver si finalmente el Ayuntamiento dará el paso al frente y pondrá a disposición del Pan Nuestro ese solar que permita la construcción de estas instalaciones lo ideal sería, según Jiménez Zayas, que estuviese cerca del propio comedor ubicado en el corazón del polígono industrial de Fadricas, de manera que toda esta actividades de carácter social estaría concentrada en una misma zona.
Dos años
Precisamente el próximo mes de noviembre, concretamente el día 24, se cumplen dos años desde que las nuevas instalaciones del Pan Nuestro abriesen sus puertas en el polígono. Y en este periodo la crisis ha provocado que el número de comidas diarias se hayan duplicado con respecto a las que se ofrecían en el anterior comedor ubicado en La Casería. De hecho, la media diaria es de 230, lo que hace que en estos momentos el comedor esté prácticamente desbordado.
Además, se están ofreciendo dos modalidades de atención a los usuarios. Están los que reciben el servicio completo, es decir, que se duchan, desayunan, se visten y comen en el comedor, y luego aquellas personas que acuden para llevarse la comida a sus casas para que puedan almorzar todos sus miembros. Inclusive hay días que se llevan comidas para núcleos familiares formados por hasta nueve personas.
Por último, el jueves se celebrará una misa de acción de gracia por los 17 años del Pan Nuestro.
