El domingo fue un día claramente primaveral, posiblemente el primero de la temporada donde brota la naturaleza, después de un temporal que ha convertido el pasado invierno en el más lluvioso tal vez de los últimos 75 años. El mejor regalo fue el sol que cosquillea sobre las cabezas, el olor a azahar y cómo la gente se echó a la calle para vivir varias de las citas programadas.
La primera tuvo lugar poco antes de mediodía. Desde la parroquia de San Francisco saldría un niño que escenifica la resurrección de Cristo, que en Arcos, como ya se sabe, se da una semana después de su famoso Toro del Aleluya. Ese día claramente primaveral ayudó a que la procesión del Dulce Nombre de Jesús contara con un gran acompañamiento de público, sobre todo durante la salida y a la llegada del cortejo a la Corredera tras bajar por la calle Alta.
La tarjeta de presentación de la alegre procesión fue la cruz de guía, a lo que siguió una nutrida representación municipal dirigida por el alcalde José Luis Núñez, numerosos hermanos, representantes de otras hermandades, los acólitos, el sacerdote Manuel Rodríguez Salas y el paso del Niño de San Francisco. La canastilla de plata fue exornada discretamente con claveles blancos, luciendo Jesús Resucitado su característico banderín rojo.
El paso fue dirigido por Juan Antonio García Pajuelo, habitual en estas citas; un director con magisterio responsable en este sentido de más de una salida procesional en Arcos. El itinerario de este año, a diferencia de otras ediciones, tomó por San Francisco, Gomeles, Alta, Corredera, Peña Picada, Plaza de las Aguas y, de nuevo calle, San Francisco.
El desfile contó con la participación de la magnífica Agrupación Musical La Sentencia, de Jerez de la Frontera. Las hermanas que quisieron, entre ellas la hermana mayor, Milagros García de Veas, lucieron mantilla, lo cual dio un solemne ambiente a la procesión del Resucitado.
Como ya adelantó este medio, la hermandad del Dulce Nombre prepara, ya para el próximo año, el VI Congreso de Hermandades del Dulce Nombre de Jesús de toda España, lo cual dará por un día cierto protagonismo a la ciudad en el contexto nacional.
