Pese a lo vertido durante la última semana respecto a posibles contactos entre las distintas fuerzas políticas para estudiar la gobernabilidad de la ciudad, hasta la tarde de este jueves no empezarán las reuniones de Arcos en Común con los demás partidos; en primer lugar con el PSOE, y este sábado con PP y Ai-Pro. Así lo confirmaron la candidata de la agrupación de electores, Susana Pérez, y el número dos de la candidatura, Antonio Iglesias, quienes aprovecharon su última aparición mediática para agradecer una vez más el apoyo recibido en las urnas.  Pérez entiende que ese apoyo ha puesto a Arcos en Común en una situación “compleja y con muchas responsabilidad”, entre otros motivos porque tiene las llaves del futuro gobierno de la ciudad.


Por lo pronto, el primer compromiso que ha arrancado Arcos en Común es que las reuniones con el resto de fuerzas queden registradas en una grabación, para, a renglón seguido, emitir un acta con el contendio de la negociación. Con ello, la formación ha buscado desde un primer momento la máxima transparencia, que es una de las premisas de su programa electoral.  Arcos en Común celebrará a las 19.00 horas de este sábado 6 de junio una asamblea ciudadana en el antiguo restaurante El Telescopio (debajo de la peña) al objeto de trasladar el contenido de las reuniones y, tal vez, ir tomando las primeras decisiones respecto al futuro gobierno del municipio.


La idea es que las decisiones que se adopten se correspondan con el deseo de la asamblea, siempre desde una óptica de respeto y participación.


En cualquier caso, el tiempo apremia porque falta una semana para el acto de toma de posesión del nuevo gobierno, pero facilitar el espacio de diálogo no ha sido una tarea fácil para Arcos en Común, señala Susana Pérez, ya que la fijación de un calendario de reuniones se ha visto condicionado desde el primer momento por su trabajo particular fuera de Arcos.
Pérez Sánchez manifestó que ha sido el resto de fuerzas las que han contactado con Arcos en Común y no viceversa, con lo que ha querido disipar algunas dudas y bulos despertados durante los últimos días.


Sobre la grabación de las reuniones políticas, también admitió que algunas fuerzas han sido reticentes inicialmente por cuestión de pudor o del uso  que pudiera hacerse de esos registros.