Conmemoración que los ecologistas de Greenpeace aprovechan para denunciar el “nulo avance” de España en la lucha contra la desertificación, ya que un tercio de la superficie, afirmaron, sufre “gravísimos” problemas de erosión.
Para el responsable de contaminación de Greenpeace, Julio Barea, España es el país de Europa con mayor grado de desertificación y sigue con niveles altísimos de pérdidas de suelo: un tercio de la superficie española tiene gravísimos problemas de desertificación y erosión, y un 6 por ciento está perdido “de forma irremisible”.
A su juicio, España no pone medios y sigue apostando además por la agricultura intensiva, incluso en las regiones más frágiles como el sudeste español, Levante y Andalucía.
Urge, defiende este ecologista, frenar la sobreexplotación de los recursos hídricos, sobre todo de los acuíferos. Esta sobreexplotación, aseguró, ha puesto “en peligro de muerte” parques naturales como el de las Tablas de Daimiel o el de Doñana.