La Policía Nacional ha detenido en Algeciras a una mujer de 39 años, trabajadora de una empresa de reparto, acusada de sustraer varios de los paquetes que tenía que entregar, en su mayoría teléfonos móviles de alta gama y electrodomésticos, para después venderlos.
En una nota, la Policía explica que una conocida empresa de transportes encargada del reparto de pedidos de diversas plataformas comerciales en Algeciras había advertido a los investigadores que desde el pasado mes de agosto venían presentando denuncias ante dichas plataformas.
Dichas denuncias señalaban importantes anomalías en las entregas por la falta de la mercancía, así como por la presunta sustracción en los mismos vehículos de reparto.
La investigación determinó que una empleada estaba actuando de forma fraudulenta, apropiándoselos de los mismos para, posteriormente, venderlos y obtener grandes beneficios, ya que la mayoría de estos efectos eran terminales telefónicos de alta gama, así como otros electrodomésticos.
Según los investigadores, para su “modus operandi”, la detenida aprovechaba que debía “etiquetar”, como ella misma describió, los paquetes que llegaban para asignarles una ruta de entrega, paso que omitía, y ocultaba los paquetes en su vehículo de reparto.
La detenida también manifestó que disponía en la misma ruta de reparto solía contactar con personas en la vía pública para vender los efectos, entre ellos unos veinte teléfonos móviles de gama alta, valorados cada uno en alrededor de mil euros, por los que recibió 900 euros por cada uno.
Además, llegó a interponer una denuncia en dependencias policiales en la que daba cuenta de que, mientras hacía el reparto diario, personas desconocidas le habían sustraído del vehículo una gran cantidad de teléfonos móviles, si bien en el momento de la detención los agentes le intervinieron uno de los teléfonos cuya sustracción había denunciado, del cual se había apoderado para su uso.
Debido a estos hechos fue detenida por un presunto delito de simulación.
Además, la Policía Nacional continúa las gestiones para la localización de las personas que compraron los objetos, por lo que no descartan nuevas detenciones por delitos de receptación.
La detenida, que pasó a disposición judicial, ha quedado en libertad con cargos.