La sequí a acuciante que vive España y, en concreto, Andalucía en los últimos años está alcanzando límites insospechados que se plasman en el bajo nivel de agua de los embalses.
En el Campo de Gibraltar, los embalses de Charco Redondo, Guadarranque y Almodóvar no llegan ni a 50 hectómetros cúbicos de agua, según los datos de la red Hidrosur, muy lejos de los casi 170 de capacidad máxima que atesoran. Hace doce meses contaban con unos 17 hectómetros cúbicos más. Según las estimaciones de la empresa pública Arcgisa, la comarca necesita unos 45 hectómetros cúbicos de agua cada año lo que, teniendo en cuenta la evaporación, supone un margen de diez u once meses restantes.
“La situación es muy preocupante, estamos viviendo probablemente la peor sequía de la historia si esta situación continúa unos meses”, asegura José Manuel Alcántara, gerente de la empresa pública Arcgisa. “Hasta ahora la peor fue entre 1992 y 1995, pero la serie de precipitaciones de los últimos años, si no llueve, superará todos los registros históricos”, agrega en declaraciones al programa La Comarca de Cerca, de 7TV Campo de Gibraltar.
“La diferencia es que ahora se ha hecho una gestión de la sequía mucho mejor, que permite que tengamos recursos para casi un año, pero si sigue sin llover en las próximas semanas, la situación se va a complicar”, detalla Alcántara.
En los próximos días se convocará la mesa de la sequía de la comarca, donde se contemplarán diversos escenarios según el nivel de las posibles precipitaciones y sus correspondientes medidas para sobrellevar la situación. “En el peor de los casos, habrá restricciones de consumo y no más lejos del inicio de 2024”, advierte Alcántara.
Mientras ciudadanos y administraciones miran al cielo, los embalses sufren las consecuencias de la escasez de lluvias.