Todavía les brillan los ojos al recordar lo que ha sido una experiencia inolvidable para ellos tras dos años casi de ostracismo debido a la pandemia del covid-19, que tanto ha marcado a tantas personas, muchas de las cuales han perdido a seres queridos y, en su caso, al tratarse del sector más vulnerable de la sociedad; los mayores. Préstame tus manos se ha convertido en todo un símbolo para la Residencia de Personas con Alzheimer Nuestra Señora de La Paz de Chiclana, un proyecto en el que han participado alrededor de 40 personas entre usuarios -unos 25- y trabajadores de distintas áreas del centro y el resultado, inmejorable, un lienzo con la Santa Faz de Cristo en recuerdo a la Biblia, cuando Santa Verónica limpió la cara de Jesús cargado con la cruz hacia el monte del Olivo.
Un cuadro que ha sido cedido a la Hermandad de Los Afligidos que lo ha acogido con las manos abiertas y que incluso ha salido a la calle acompañando a su imagen en el Martes Santo chiclanero. Préstame tus manos es el resultado de una experiencia pionera que ha llegado para quedarse, puesto que la intención es que a esta primera obra sigan varias más en los próximos meses y con los mismos protagonistas.
La idea surgió en noviembre del pasado año 2021 a modo de homenaje a los supervivientes de la pandemia, los fallecidos, las familias y a los profesionales que han estado en primera línea durante todo este tiempo. Pese a la aportación de todos, residentes, familiares y trabajadores, Óscar Espinosa Martínez, terapeuta ocupacional de la residencia, y el pintor Manuel Manzano, han sido las cabezas visibles de un proyecto que les ha está reportando muchas satisfacciones, y a buen seguro que vendrán muchas más...
De hecho, ha llegado hasta la Universidad de Sevilla de Periodismo, gracias al hijo de una de las trabajadoras que está estudiando allí y que ha realizado un documental para la asignatura de Comunicación para el Desarrollo Social.
A Óscar, que nació en Bilbao pero ya se siente un chiclanero más -sus hijos han nacido aquí-, se le ilumina la cara al hablar de lo que ha supuesto Préstame tus manos para todos los que forman la familia de la residencia ubicada en la zona de Los Gallos. “Ha sido una satisfacción enorme. Entrábamos en el entorno que habíamos preparado para desarrollar la actividad y desde el primer momento se creó una especie de situación idílica, todo adaptado para que ellos pudieran pintar, con música relajante y más en esta época de Semana Santa que se vive con tanta pasión..., la verdad es que a todos nos sorprendió el resultado. La gente ha participado de una manera increíble, se ha volcado”.
Recuerda que “han sido dos años muy duros, sobre todo para nuestros residentes y este tipo de iniciativas que trae a gente de fuera ha sido muy emocionante. Ha servido para transmitirles ese mensaje de paz y esperanza de que vamos a estar mejor. Se dan cuenta que hay gente de fuera de este centro que nos ven, nos esperan y nos escuchan. Las sesiones previas antes de empezar a pintar han sido impresionantes”, afirma Óscar Espinosa, quien añade que “somos personas físicas, psíquicas y espirituales y en ese punto cuando todo confluye es fantástico. Son milagros que se producen y este cuadro ha sido uno de esos milagros”.
“Nuestro objetivo es que la sociedad sea capaz de cambiar la visión que tienen las personas con discapacidad. Nos están surgiendo muchas actividades significativas para hacer, para ser y para llegar a ser. Todo es posible y todo está por hacer con amor incondicional, trabajo duro y sonrisas infinitas”, finaliza Óscar Espinosa.
Manuel Manzano
Manuel Manzano, que ha ejercido de maestro de pintura con todos ellos, también está muy feliz por el resultado final de este primer cuadro de esta iniciativa. “Préstame tus manos es un proyecto precioso que se ha convertido en una realidad. Se me ocurrió realizar esta Santa Faz en la que se recogiese un poco de todo lo que hemos pasado en estos dos años, esa soledad, miedo, incertidumbre, incluso con pérdida de personas. Y me acordé de las personas mayores, que son la parte más vulnerable de este sociedad. Tengo un familiar en este centro, puse la idea sobre la mesa y no puedo estar más orgulloso porque todos me acogieron con los brazos abiertos”.
Préstame tus manos “ha sido una forma de reivindicar que ellos siguen estando aquí, que son muy válidos”, señala el pintor, que añade que “creo que era un buen momento para regresar a la normalidad y saber que podemos seguir contando con ellos”.
Para poder realizar el lienzo ha sido necesario adaptar las técnicas de dibujo a los usuarios de la residencia de alzheimer mediante el uso de esponjas o a través de pinceles pequeños. “Solo puedo decir que ha salido todo a pedir de boca, ha habido incluso algunos participantes que nunca antes en su vida habían realizado algo parecido y han sido unas agradables sorpresas”, apunta Manuel Manzano.
El artista también agradece el trato que desde el primer momento recibió de la Hermandad de los Afligidos para que se quedasen con la pintura. “No queríamos que el cuadro se quedase en un cajón o colgado de una de las paredes de la residencia. Quería que fuera una reivindicación social y que una hermandad pudiese portar esta Santa Faz. En Afligidos me acogieron, me escucharon y me abrieron los brazos desde el primer momento en el que hable con ellos. Verla procesionar un Martes Santo es darle el protagonismo que se merecen los residentes, los auténticos culpables de todo lo que hemos desarrollado”.
Por último, Manuel Manzano ya tiene en mente los siguientes proyectos con la residencia de alzheimer, sus usuarios, familiares y trabajadores. “Estoy encantado porque sinceramente les debo una. Solo me queda darle las gracias a todos los profesionales que trabajan aquí por como han aceptado con tanto cariño e ilusión esta iniciativa”.
José Luis Arcila es uno de los residentes que ha participado en la elaboración del lienzo. En su caso se encargó de realizar parte de las zonas externas de la cara. Encantado con la experiencia, afirma que “ha sido toda una bendición, además me cogió en un día bueno porque tenía la tensión hasta perfecta para poder escribir”.
Recuerda que nunca antes había pintado, salvo en su época de estudiante. “Yo por mi trabajo de mecánico nunca se me hubiese pasado por la cabeza pintar, solo pinté algo cuando estudiaba en tercero de Bachillerato y de ahí ya empecé a trabajar”. José Luis no tiene la menor duda de que volverá a participar en el futuro cuadro que se pretende acometer dentro del proyecto. “Está claro que si se me presente la posibilidad, me vuelvo a animar.
Nunca había cogido un pincel
Otro de los que ha sorprendido por sus aptitudes sin haber cogido nunca un pincel fue Manuel Martínez, que se encargó de darle sombra a la cara de la imagen. “Yo nunca había hecho nada por el estilo, la verdad es que me sorprendió hasta a mi mismo”, afirma este chiclanero todo un amante de la Virgen del Carmen de Sancti Petri, que es como una madre para él.
Manuel estuvo acompañado durante el reportaje por su hijo, también Manuel de nombre, que estaba muy agradecido a la Residencia de Personas con Alzheimer Nuestra Señora de la Paz por esta experiencia. “La verdad es que me ha sorprendido mucho, sobre todo porque como él mismo dice nunca había cogido un pincel, y viendo el resultado parece que no se le da mal”.
Reconoce que “para un familiar es muy difícil ver a una de las personas que más quieres en tu vida en un sitio así, pero si este tipo de proyectos les animan a seguir para adelante y a ejercitar la memoria, bendito sean. La verdad es que tanto a ellos como a nosotros nos ayuda mucho”.
Ahora toca esperar para ver cuál es el resultado de la siguiente obra de arte que sale de las manos de residentes, trabajadores y familiares bajo la supervisión de Manuel Manzano, que a buen seguro volverá a sorprender. n