La recaudación de tributos municipales en Conil en el último año rondó los 15,8 millones de euros: la cifra exacta asciende a 15.790.635 euros entre los ingresos obtenidos en los periodos voluntarios de pago y los procedentes de la vía ejecutiva. Este dato mejora levemente el resultado de 2018 y es inferior al de 2019, si bien “se ha logrado mantener una estructura estable de ingresos a favor del ayuntamiento, justo en unos momentos de especial dificultad”, ha destacado el responsable del área de Servicios Económicos de Diputación, Juan Carlos Ruiz Boix. Los índices que resumen el comportamiento del año fiscal han sido expuestos en el curso de una videoconferencia celebrada junto a la responsable de Hacienda del Ayuntamiento de Conil, Fátima Núñez.
“Valoro especialmente la responsabilidad social de los contribuyentes”, añade Ruiz Boix tras comprobar los altos ratios de cumplimiento fiscal en relación al padrón. Por ejemplo en el IBI urbano, principal figura tributaria en términos cuantitativos, se ha recaudado el 90 por ciento de lo referido en las listas cobratorias. “Así como el rigor del Servicio Provincial de Recaudación que en el año 2020 mantuvo los anticipos previstos a comienzos del ejercicio, pese a la posterior declaración del estado de alarma y su incidencia en la gestión tributaria”.
Efectivamente los anticipos, a cuenta de la previsión de ingresos fiscales, se transfirieron cada mes al Ayuntamiento de Conil. Al término el ejercicio se contabilizaron, por este concepto, casi 14 millones de euros (13.836.000 exactamente). A tenor de la evolución del año, en diciembre -y en calidad de pre-liquidación- se resolvió un fondo adicional de 700.000 euros a la hacienda conileña.
Con el balance fiscal ya definitivo el Servicio Provincial de Recaudación y Gestión Tributaria ya puede confirmar que la liquidación del año 2020 es positiva para el Ayuntamiento de Conil. La suma de anticipos transferidos es inferior a los tributos efectivamente ingresados, por lo que Diputación tendrá que abonar el importe para equilibrar la cuenta. Esa nivelación, a favor de la hacienda municipal, se cifra en 1.145.000 euros.
Cuando sobrevino la pandemia “la recaudación se paralizó durante tres meses”, ha recordado Ruiz Boix, quien también expuso algunas de las iniciativas adoptadas por el Servicio Provincial de Recaudación y Gestión Tributaria: los calendarios fiscales se ampliaron en tres ocasiones, sin recargos ni intereses; se flexibilizaron los criterios para fraccionar el pago de deudas; y no se cobraron cuotas de operaciones fraccionadas durante el estado de alarma.
En estas circunstancias los medios telemáticos de Recaudación, como la sede electrónica o la aplicación DipuPay, demostraron ser instrumentos solventes para la liquidación de obligaciones tributarias. La atención telefónica también experimentó una sensible mejora con la incorporación de un nuevo programa y la renovación de los números de las oficinas distribuidas en la provincia de Cádiz.