La plantilla de la empresa Caballero acudió ayer al Pleno ordinario para solicitar el apoyo de la Corporación municipal, conseguido además por unanimidad, para, de manera preventiva, indicar que se comiencen a dar pasos para que las estrategias de la empresa no se conviertan en otro ejemplo del Club Mediterráneo, como explica la representante de los trabajadores, Esperanza Flores.
Asegura que fue por los medios de comunicación por los que se enteraron de la recalificación de los terrenos de la empresa, “por ello hemos solicitado reuniones para que nos den información, pues existe una preocupación con la consiguiente alarma social que se creó”, explica.
Así, advierten que “el ponche, producto estrella, no está sujeto al consejo regulador, por lo que se puede hacer en cualquier punto de España”, al igual que ocurre con el brandy y otras bebidas espirituosas, “lo que puede llevar a la deslocalización”. Los únicos que están sujetado a la provincia, que no a la localidad, son los vinos del marco, pero insisten en que su producción ha disminuido. Por ello temen que la empresa se pueda quedar sólo con una persona, en el Castillo de San Marcos, de su propiedad, y el resto sean despidos, como ya ocurriera hace unos meses con las personas que ostentaban más antigüedad.
Por ello esperan un esfuerzo municipal para exigir a Caballero que se mantenga el volumen de producción y la productividad, lo que supondrá que los puestos de trabajo se tendrán que quedar, y lo que además conseguirá riqueza para la ciudad. Esto se consigue atando, a través de los documentos urbanísticos destinados a ello, dícese del PGOU y el Pepch, para que mantengan la producción tras la reubicación de las instalaciones de la calle San Francisco, 32, en otro espacio, pero dentro de la ciudad.
El lunes habrá una asamblea de trabajadores, por lo que será entonces cuando el comité de empresa se extienda en su postura.
Apoyo de IU
Una de las propuestas dedicadas al empleo recibidas por el Pleno, indica IU, ha sido la que ha contado con el apoyo de todos los grupos, tratando sobre la relación directa entre el futuro convenio urbanístico de Bodegas Caballero y el mantenimiento de la actividad industrial. Dentro del Plan General de Ordenación Urbana y el Plan Especial del Casco Histórico, de inminente aprobación, los solares e inmuebles propiedad de Luis Caballero, S.A. se ven afectos a una fuerte recalificación. Lo que beneficia a la firma bodeguera que verá revalorizados unos terrenos hasta 20 veces su valor actual por cambiar su uso de industrial a residencial y terciario.
IU se opondrá a la aprobación del PGOU y del Pepch si no se garantiza la estabilidad de los actuales puestos de trabajo en El Puerto.Según el concejal de Izquierda Unida, Julio Acale, “este cambio de uso en los terrenos debe lleva aparejada una obligación de la empresa para garantizar la estabilidad del empleo, y el mantenimiento de su actividad en El Puerto”.
Acale considera que “el Ayuntamiento tiene la sartén por el mango y es hora de mojarse” y pone como ejemplo lo sucedido con la Bodega 501 que trasladó la crianza, elaboración y embotellado de la bodega portuense a las instalaciones de otra firma bodeguera de Jerez, con la consecuente destrucción de empleo en nuestra ciudad.
El equipo de Gobierno “tienen la posibilidad de posicionarse del lado de los trabajadores y del empleo o dar un cheque en blanco a la empresa”, que obtendrá un gran rédito con la recalificación de sus terrenos por lo que “el Ayuntamiento tiene la obligación de velar por el mantenimiento integro del empleo en Bodegas Caballero”, concluye Julio Acale.