La verdad es que empiezo bien este articulo de opinión, no utilizando el lenguaje gramaticalmente no sexista, en mi opinión artificioso, de las y los abajo firmantes. Nunca he discriminado a nadie por razón de nacimiento, raza, sexo, religión, opinión o cualquier otra condición o circunstancia personal o social.
Podré estar de acuerdo o no con distintas ideas, pero siempre desde el respeto que me merece toda persona, sin distinguir si pertenecen a un género u otro. No estoy en contra de quien se arroga la lucha legítima de la visibilidad de la mujer en la sociedad.
Cada uno es libre de enarbolar la bandera que estime oportuna. Pero si estoy en contra del “talibalismo” y, sobre todo del adoctrinamiento de pensamiento único y a todas luces totalitario.
Cada vez que escribo un artículo de opinión, en el legítimo ejercicio de mi libertad de expresión, siempre lo hago sobre las acciones u omisiones de los actores políticos que nos gobiernan, jamás sobre las personas que los encarnan que me merecen el mayor de mis respetos.
En mi forma de expresarme utilizo con asiduidad el recurso a la ironía como herramienta argumentativa a la hora de articular mi opinión, y quizás no siempre se pueda entender correctamente. Puede que la ironía esté reservada a quienes manejan hábilmente la inteligencia emocional y ya me extraña porque vivimos en una tierra donde la ironía forma parte intrínseca de nuestra forma de ser. Tal vez algunos estén perdiendo el sentido del humor.
Todo esto viene a colación porque se ha firmado un manifiesto por “los abajo firmantes” en solidaridad “fraterna” con la Sra. Luque (Levantemos) y con la Asamblea Feminista Las Tres Rosas. Por mi artículo de opinión “Miss absentismo” me han metido como integrante de una campaña de acoso y derribo personal contra una mujer, en este caso, la concejala de Deportes y Fiestas, Rocío Luque (Levantemos). Nada más lejos de la realidad.
Si tienen a bien volver a leer con detenimiento mi artículo, la crítica de fondo que subyace, es meramente política, y se centraba en que la Sra. Luque se ausentaba con más frecuencia de lo habitual de las fiestas que se celebran en Nuestra Ciudad, cuestión esta más que evidente y que “los abajo firmantes” no han criticado, limitándose a ver lo que “los abajo firmantes” les ha interesado políticamente. La comparación entre la Sra. Luque y la “Joconda” es un simple recurso irónico, sin ningún atisbo de ataque sexista ni mucho menos personal hacia la Sra. Luque.
De igual forma hubiese sido objeto de mi crítica, si el responsable de fiestas, hubiese sido un hombre y procediera de la misma forma, aunque no hubiese podido establecer una comparación entre la “Joconda” y un hombre. En esta contradicción no han caído “los abajo firmantes”. ¿Cómo es posible que se elimine por cuestiones ideológicas el concurso de Miss Flamenca y se mantenga como imagen de un cartel de feria a una mujer vestida de Flamenca?. Para ser coherente, hay que serlo hasta el final, si no se corre el riesgo de caer en el sectarismo y el adoctrinamiento más reaccionario.
Por otra parte, “los abajo firmantes” están dando, bajo mi punto de vista, un mensaje nuevamente contradictorio ¿Es que la Sra. Luque no puede defenderse por sí misma ante las críticas que recibe por su acción u omisión política?
Por cierto, hablado exclusivamente de flores, siempre preferí las hortensias, bellamente sublimes y a la vez resistentes a las inclemencias del tiempo.