Como ha explicado, el primer teniente de alcalde y delegado de Urbanismo, Antonio Saldaña, “el convenio parece una puesta en escena, a bombo y plantillo, para dar la sensación de que se ayuda a los vecinos, pero paralizando de hecho las actuaciones. Al no aceptar esta propuesta, ya que el Ayuntamiento no tiene dinero, pero sí suelos, la Junta nos está negando a todos, al PSOE cuando gobernaba, a nosotros y en definitiva a los vecinos la posibilidad de arreglar estas viviendas”.
Saldaña también se ha referido a la barriada la Alegría “donde la Junta ha intentando trasladar la pelota al tejado de los vecinos, a los que se les exige el arreglo de forma simultánea de todos los bloques. Para nosotros esto no es jugar limpio, ya que desde la Junta hay que dar facilidades a los vecinos, en barrios que no tienen gran poder adquisitivo. La Junta debe programar de forma que haya una certidumbre para que los vecinos puedan encontrar el dinero, y no exigiendo actuaciones de una vez, enmascarando la imposibilidad de hacerlo”.