La información, que contabiliza ochos nuevas víctimas mortales, no detalló la etnia de las víctimas, aunque en las estimaciones oficiales anteriores se había señalado que tres cuartas partes de los fallecidos eran chinos de la etnia han (mayoritarios en el país) y 46 eran uigures musulmanes.
No se detalló tampoco en esta ocasión cuáles de los fallecidos murieron el 5 de julio, cuando se informó principalmente de ataques de uigures contra chinos han, o en jornadas posteriores, en las que se reportaron linchamientos de han contra uigures, especialmente el 7 de julio.
Los disturbios de Urumqi han sumido a la ciudad en permanente estado de alerta, con fuerzas paramilitares todavía patrullando las calles, y aunque la situación es de relativa normalidad, con comercios abiertos y vehículos circulando por las calles, la tensión sigue siendo tensa.